Aguilera revela presiones ‘internas y externas’ sobre la suplencia en la Gobernación de Santa Cruz: ‘No soy traidor ni cobarde’
El vicegobernador de Santa Cruz, Mario Aguilera, afirmó este jueves que atraviesa una serie de presiones “internas y externas” para asumir el cargo en suplencia de la Gobernación de Santa Cruz en reemplazo de Luis Fernando Camacho, detenido preventivo en el penal de Chonchocoro.
En conferencian de prensa, afirmó que se encuentra en una situación “difícil” ante la determinación que vaya a asumir la Sala Constitucional Tercera en la audiencia de Acción de Cumplimiento postergado para el 23 de febrero.
Aguilera consideró que se encuentra en medio de un escenario donde podría acatar la orden del juez o bien que se le inicien un proceso penal para que vaya detenido, incluso, reveló que existe una tercera opción que a “algunas personas que les parece interesante”: su renuncia; sin embargo, dijo no estar dispuesto a hacerlo.
“Yo no soy ni traidor, ni cobarde que es el escenario que muchas personas quieren hacer ver como la única alternativa. Soy una persona leal, consecuente y responsable, autonomista e institucionalista”, remarcó.
Desde que lo encarcelaron en el penal de Chonchocoro, Aguilera informó que no pudo reunirse con Camacho hasta el momento debido a que las personas que deberían gestionar un encuentro no lo hicieron.
También descartó tener algún tipo de relación o vinculo con el Gobierno o el Movimiento Al Socialismo (MAS) y aseguró que su manera de actuar es “transparente” y que tampoco tiene porque esconderse de nadie.
“Si el Gobernador renuncia, yo me voy automáticamente con él. Si el Gobernador se mantiene en su posición, yo voy a mantener la gestión del Gobernador, desde esta institución, desde esta silla con la responsabilidad que conllevaron el compromiso con el pueblo”, sostuvo.
Respecto a su trabajo y coordinación con Creemos, Aguilera reveló que tiene “muy poca relación” y que incluso “una relación política, prácticamente, no existe”.