ESTE SÁBADO
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Francisco recibe el último adiós entre multitudes y líderes mundiales

Miles de personas en la Plaza de San Pedro, durante el funeral del Papa Francisco. Tomado de Europa Press

El mundo entero se reunió este sábado en Roma para despedir al Papa Francisco, el pontífice que hizo de la cercanía su principal sello. Cerca de 400.000 personas, entre fieles, delegaciones oficiales y jefes de Estado, acompañaron las honras fúnebres en una Plaza de San Pedro colmada de emoción y recogimiento.

Tras la ceremonia, el cuerpo de Francisco fue trasladado en cortejo solemne hacia la Casa de Santa Marta, donde ahora descansa, cumpliendo así su deseo de un entierro sencillo y cercano al lugar donde vivió sus últimos años.

El funeral comenzó pasadas las diez de la mañana, con la presencia de más de 50 jefes de Estado y 150 delegaciones internacionales. El sencillo féretro de madera, sin ornamentos, fue colocado en el centro de la plaza, frente a la imponente Basílica de San Pedro.

La misa de exequias, presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, rindió homenaje a la figura de Francisco como "un Papa en medio de la gente, con el corazón abierto a todos".

En un gesto que fue interpretado como un mensaje directo a los líderes mundiales presentes, el cardenal recordó el llamado insistente de Francisco a “construir puentes y no muros” y su firme defensa de la paz en tiempos de conflicto.

Entre las primeras filas se encontraban los reyes de España, Felipe VI y Letizia, el presidente estadounidense Donald Trump junto a su esposa Melania, el presidente argentino Javier Milei, la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski y el príncipe Guillermo, en representación de la monarquía británica. Los asistentes rompieron el silencio en varios momentos de la homilía, tributando con aplausos espontáneos el recuerdo del Papa que no dudó en alzar su voz contra las guerras, en defensa de los migrantes y en favor de los más desfavorecidos.

Al concluir la ceremonia, bajo un cielo parcialmente nublado, el féretro fue trasladado en procesión mientras miles de fieles, alineados a lo largo de las vías romanas, rezaban o entonaban cantos de despedida.

Finalmente, en un acto íntimo y sin grandes formalidades, el cuerpo de Francisco fue depositado en la Casa de Santa Marta, el lugar que eligió como su hogar desde el inicio de su pontificado, lejos de los tradicionales apartamentos papales. Allí, en la sencillez que caracterizó su vida y su ministerio, reposa ahora quien dedicó su existencia a tender lazos de fraternidad entre los pueblos.

Fuente: agencias internacionales