El Fondo Monetario Internacional (FMI) recomendó al Gobierno boliviano adoptar medidas económicas urgentes para corregir los crecientes desequilibrios fiscales y externos del país, y así evitar un ajuste desordenado que podría tener consecuencias dolorosas para la economía nacional. La advertencia fue emitida tras la conclusión de la consulta del Artículo IV, realizada por el Directorio Ejecutivo del organismo el pasado 2 de mayo.

El FMI expresó su preocupación por lo que considera una combinación de políticas insostenibles, marcada por un tipo de cambio sobrevaluado y un nivel críticamente bajo de reservas internacionales.

En su informe, el organismo instó a realizar un realineamiento cambiario acorde a los fundamentos del mercado, avanzar hacia una mayor flexibilidad cambiaria, y aplicar una consolidación fiscal sostenida acompañada de medidas monetarias restrictivas.

Entre las recomendaciones específicas se incluyen la reducción gradual de los subsidios a los combustibles, el control del gasto público —particularmente en la masa salarial— y el fortalecimiento del marco fiscal. Asimismo, el FMI hizo hincapié en la necesidad de proteger a los sectores vulnerables mediante una red de protección social más eficiente y mejor focalizada.

El Directorio también subrayó la urgencia de fortalecer la supervisión financiera, diversificar las inversiones de los fondos públicos de pensiones y aplicar reformas estructurales que estimulen la productividad y el crecimiento, eliminando barreras como los topes a las exportaciones, los controles de precios y las cuotas de crédito.

La próxima revisión del Artículo IV para Bolivia se realizará en un plazo de 12 meses, según el calendario regular del FMI. Mientras tanto, el organismo reafirmó su disposición a colaborar estrechamente con las autoridades bolivianas en la implementación de estas reformas clave.