La Fiscalía decidió imputar a dos guardias de seguridad de una clínica de La Paz, quienes son acusados de privar de la libertad a un ciudadano debido a una deuda que tenía por la atención que recibió su padre en el centro médico, informó el subdirector de la fuerza anticrimen, coronel Juan José Donaire.

La Fiscalía indicó que la justicia determinó la detención domiciliaria de los guardias, con fianza y arraigo, mientras se realiza su proceso.

El caso se registró el fin de semana, cuando un ciudadano de nacionalidad venezolana fue retenido en la clínica ubicada en la zona Miraflores, donde su padre recibió atención antes de haber fallecido.

Según el reporte policial, se había acumulado una deuda de unos 100 mil bolivianos, por lo cual los guardias de seguridad habrían retenido al ciudadano por más de 24 horas.

La Policía intervino en la clínica y, ante la flagrancia de lo ocurrido, aprehendió a los guardias de seguridad. El Ministerio Público los imputó por el delito de privación de libertad y se espera la audiencia de medidas cautelares, indicó Donaire.

Si bien los aprehendidos se acogieron al derecho a guardar silencio, el jefe policial señaló que se están realizando las investigaciones respectivas para identificar a los autores intelectuales de la privación de libertad, que podrían ser los administradores de la clínica.

Según el fiscal departamental Marco Cossío, los aprehendidos afirmaro que sólo cumplían órdenes, por lo cual se sigue la investigación.

El caso también fue atendido por la Defensoría del Pueblo, la cual ratificó que ne los centros de salud está prohibido retener a las personas o a los restos humanos por la falta de pago por los servicios ofrecidos. 

La entidad defensorial indicó que, en caso de deuda, el personal del centro médico debe acudir ante las instancias y vías legales correspondientes, pues lo contrario implica la generación de responsabilidad penal y la violación de los derechos fundamentales.