Tras la inscripción de candidaturas a alcaldías, concejalías y gobernaciones, el analista político Manuel Morales advirtió que las alianzas LIBRE y PDC, las dos fuerzas más votadas en los últimos comicios generales, llegan a las elecciones subnacionales “destrozadas en términos de institucionalidad partidaria”, como consecuencia del frágil liderazgo de Jorge Tuto Quiroga y Rodrigo Paz para consolidar ambos proyectos políticos a nivel nacional.

Afirmó que el panorama resulta desalentador porque el desenlace de una crisis institucional que ya se evidenció en el proceso electoral de 2025, cuando la debilidad de los partidos dio paso a alianzas construidas en medio de una “promiscuidad política”, sin estructura ni coherencia programática.

Para las elecciones de agosto y octubre 2025, la Alianza Libre de Jorge Tuto Quiroga formó una sociedad política con el FRI, Demócratas y varios partidos locales, mientras que el PDC participó a la cabeza de Rodrigo Paz en alianza con Nuevas Ideas con Libertad (NUIL) de Edmand Lara y para estas elecciones subnacionales cada cual escogió su propio camino.

Según el analista, ambos líderes carecían de una base ideológica consistente. Señaló que Quiroga sustentó su propuesta sobre un discurso “enfermizamente anti-masista”, mientras que Paz capitalizó el voto del sector informal y de parte de la base social del masismo, acompañado de promesas altamente populistas. “No había una sólida base teórica, técnica ni ideológica”, sostuvo.

Morales explicó que esta debilidad se refleja hoy en la fragmentación interna: LIBRE se dividió en varias alianzas a nivel departamental, mientras que el PDC se encuentra dividido en tres facciones, mientras que Edmand Lara se mantiene fuera de cualquier esquema oficialista.

A ello se suman candidaturas menores, como la de Roxana Pérez del Castillo, exmilitante del MAS que postula por ADN, además de Jorge Dulon y Óscar Sogliano, quienes compiten por separado, “haciendo trizas la institucionalidad que permitió el triunfo de Iván Arias”.

“Parecería que estamos en manos de grupos del lumpen político, pero al final lo más grave es que todo perjudicará la relación entre el gobierno central y los gobiernos municipales y departamentales para trabajar el tema del 50-50 y consensuar una reforma tributaria que ya no ofrece una fórmula adecuada para la reasignación de recursos y negociar un nuevo pacto fiscal”, indicó.

Alertó que a esta fragmentación política se suma la vulneración de la Constitución por parte del Decreto Supremo 5503 que, bajo el argumento de una emergencia económica, el presidente Paz viene ejecutando en medio de una débil gobernabilidad desde la Asamblea Legislativa, donde las bancadas de Libre y el PDC también se han dividido según sus objetivos particulares y se está haciendo complicado encontrar un nivel de gobernabilidad garantizada.