EUROPA PRESS

Naciones Unidas ha declarado el año 2024 como el más letal jamás registrado para los trabajadores humanitarios a tenor de los 281 cooperantes muertos desde el 1 de enero y debido principalmente a la guerra de Gaza.

La Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) y la Base de Datos de Seguridad de Trabajadores Humanitarios (AWSD), avisan además de que las cifras de este año continúan una tendencia ascendente y sin precedentes después de que el año pasado también registrara otro récord de cooperantes fallecidos (280) en 33 países.

Los bombardeos de Israel sobre el enclave palestino han representado el principal motivo de este nuevo récord. Tanto la OCHA como la AWSD recuerdan en este sentido de que más de 320 cooperantes humanitarios han muerto en Gaza desde el estallido de la guerra por la masacre cometida por las milicias palestinas en suelo de Israel el pasado 7 de octubre.

"La mayoría de los fallecidos murieron en la línea de fuego y la mayoría eran miembros de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, la UNRWA", señalan ambas organizaciones en su comunicado.

El subsecretario general para la Coordinación de Asuntos Humanitarios y Ayuda de Emergencia, Tom Fletcher, ha alertado un año más de que "están matando a cooperantes a una velocidad sin precedentes, y su valor y su humanidad está siendo respondido con balas y con bombas".

Además, la ONU aprovecha para recordar que amenazas a los trabajadores humanitarios se extienden más allá de Gaza. Los niveles de violencia, secuestros, torturas, acoso y detenciones arbitrarias contra los trabajadores humanitarios son muy elevados también en Afganistán, la República Democrática del Congo, Sudán del Sur, Sudán, Ucrania y Yemen, entre otros países.

La OCHA recuerda que, el pasado 24 de mayo el Consejo de Seguridad aprobó la Resolución 2730 en respuesta a la creciente violencia y amenazas contra los trabajadores humanitarios.

La resolución encomienda al Secretario General que recomiende medidas para prevenir y responder a esos incidentes, mejorar la rendición de cuentas y mejorar la protección del personal y los bienes humanitarios, en una serie de propuestas que se presentarán en una sesión del Consejo de Seguridad el 26 de noviembre.