Un herido de bala en los conflictos poselectorales del pasado noviembre, en la zona de Senkata de El Alto, fue notificado por no cancelar 226 bolivianos al hospital donde se encontraba internado, por lo cual le advirtieron por escrito que podría ser enjuiciado.

“Personeros de la Caja Nacional de Salud, concretamente del Hospital Obrero, se han apersonado al domicilio del joven René Huanca (...);  le dicen que tiene tres días para pagar o si no le van a hacer un juicio coactivo y lo van a meter a la cárcel”, dijo el activista de Derechos Humanos en la ciudad de El Alto, David Inca. 

El activista detalló que Huanca, de 22 años, es uno de los heridos del 11 de noviembre y todavía tiene el impacto de bala en el talón derecho.

“Él está asegurado en la Caja y no lo han querido atender”, dijo Inca y afirmó que la razón es porque fue visto como terrorista y sedicioso. 

Precisó además que teniendo la tarjeta de atención de asegurado no fue atendido oportuna ni adecuadamente y ahora temen que la herida que ha llegado al hueso pueda gangrenarse. “La vida del joven está en peligro”, alertó.

Adicionalmente, a la familia y al activista les llamó la atención y les causó molestia que trataran al joven como si fuera un criminal y lo amenacen para pagar.

Ven presión política

Para Inca, lo anterior “se trata de una medida de presión político partidaria” en razón de que la madre de René viajó a Argentina como una de las representantes de los heridos.

Sostuvo que la madre del herido logró conseguir atención médica gratuita para todos los afectados por los conflictos en Senkata en el país del sur.