Miguel Terceros fue liberado y niega haber expresado palabras racistas en contra de otro jugador

El jugador boliviano del América Mineiro, Miguel Terceros, quedó en libertad tras haber sido detenido por presuntas palabras racistas en contra de otro jugador. En su declaración ante la Policía, negó las acusaciones y dio su versión del impasse.
De acuerdo con una publicación del portal ESPN Brasil, Terceros dijo que en ningún momento usó la palabra “negro” ni tampoco insultó al jugador Allano de Souza durante el partido del domingo.
Testimonio de Miguel Terceros ante la Policía:
Quiero hablar. Lo que pasó fue después de una jugada, una falta que le pasó a él. Pero ya había habido errores previos. Dije tres cosas, pero en ningún momento hablé directamente mientras lo miraba. Primero dije “mierda”, por la falta. Pero no fue por el jugador, fue por el árbitro, que estaba dando unas faltas que nosotros llamamos sin sentido, cuando chocamos con los chicos.
Entonces dije una expresión, mitad español y mitad portugués: "jodida mierda".
Pero en ningún momento me acerqué a hablarle directamente. Era una expresión que tenía porque le estaban haciendo falta y cosas así. No dije nada más. Cuando giro la cabeza hacia él, no digo nada. Mientras hablaba lentamente, ni siquiera lo miré, él reaccionó muy rápido, estaba molesto por los movimientos, peleando con todos, discutiendo, y comenzó a decir: "dijiste negro".
Lo miré sin entender nada, fue entonces cuando se me acercó y empezó a hablar: "¡Me llamaste negro! ¡Me llamaste negro!". Lo miré con una cara como si no entendiera lo que estaba diciendo. Entonces llegó su compañero y todos empezaron a acercarse, empezó la pelea y se detuvo el juego. "Entonces nada más"
Sí [niega haber dicho "jodido negro"], eso es todo lo que dije.
Cuando giro la cabeza lo miro dos veces. Hay uno que, cuando paso a su lado, le digo "joder", la palabra "joder". Cuando estoy delante y él detrás, y giro la cabeza, es cuando empieza a decir: "Dijiste negro", y pensé que no me estaba hablando a mí. Cuando se acerca a mí y me dice: “Dijiste negro”, señalándome, no entiendo nada. Fue entonces cuando llegó su amigo [Jacy].