En Oruro, una joven de 22 años de edad fue condenada a tres años de libertad condicionada con trabajos comunitarias, tras haber admitido la comisión del delito de Violencia Familiar o Doméstica contra su hija de cinco años.

Según la Fiscalía, el pasado 25 de mayo, la agresora golpeó en repetidas ocasiones a la niña con una manguera y posteriormente la encerró en un cuarto.

Los vecinos fueron alertados por los gritos de auxilio de la menor y llamaron a la Policía, que procedió a la aprehensión de la mujer.

“El examen médico forense determinó que la niña presentaba lesiones visibles en la espalda, brazos y piernas, estableciendo un impedimento médico legal de siete días. Se tomaron las declaraciones de la menor en Cámara Gesell con la asistencia de una psicóloga, lo cual permitió corroborar las versiones de los vecinos y de la víctima respecto a episodios previos de violencia y al contexto de los hechos”, dijo el fiscal departamental Aldo Morales.

La Fiscalía pretendía la detención preventiva de la imputada, pero ella se sometió a procedimiento abreviado y el juzgado accedió a una sentencia con sanciones alternativas.