La dirigente del extinto Partido de Acción Nacional de Bolivia (Pan-Bol), Ruth Nina, abandonó este miércoles la cárcel de San Sebastián Mujeres, en Cochabamba, por sus dichos de “contar muertos en lugar de votos” en las elecciones generales.

Algunos dirigentes y seguidores que la apoyan la recibieron en la puerta de ingreso del penal a Nina quien aseguró que se encuentra “más fortalecida que nunca”, pese al proceso que continúa en su contra.  

“Inocentemente me han encarcelado y me han amordazado para no llevar la voz de un pueblo podemos asistido. Lo que no nos mata, nos hace más fuertes”, indicó a los medios.

Fue aprehendida a fines de julio y luego imputada por los delitos de instigación pública a delinquir, amenazas y obstrucción al proceso electoral tras sus polémicas declaraciones en un ampliado en Lauca Ñ contra el proceso electoral del 17 de agosto.

Luego de concretarse su detención preventiva, anunció que se reunirá con su familia y los sectores sociales que le brindaron apoyo mientras enfrentaba el proceso ante la justicia. //agc