El juez Javier Vargas determinó este domingo enviar al dirigente universitario Max Mendoza a la cárcel de San Pedro, con detención preventiva, acusado de hechos irregulares en el ejercicio de un cargo y cobro de salario.

El plazo de la detención preventiva es de seis meses, mientras se realiza la investigación por parte de la Fiscalía. 

La semana pasada se presentaron seis denuncias contra Mendoza, ante la Fiscalía de La Paz, acusándolo de varios hechos ilícitos, como ejercer un cargo en el Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana (CEUB), sin cumplir requisitos ni tener título profesional, y además cobrar salario.

El quincuagenario, que lleva más de 30 años en la Universidad, fue aprehendido el sábado en Cochabamba y luego trasladado a La Paz. 

La Fiscalía imputó a Mendoza por los delitos de usurpación de funciones y conducta antieconómica. La audiencia se desarrolló este domingo y el juez determinó la prisión preventiva, bajo el argumento de que el sindicado no sustentó una actividad lícita y un domicilio.

La defensa de Mendoza apeló la decisión del juez, por lo cual el caso pasará a un tribunal de alzada.