IDIF sostiene que Añez no amerita internación y que su estado es estable
“Al momento la señora no amerita internación, porque su cuadro de salud es estable”. Esa es una de las conclusiones del Instituto de Investigaciones Forenses (IDF), dependiente del Ministerio Público, que realizó una valorización de la expresidenta Jeanine Añez, quien se encuentra encarcelada cinco meses.
“El cuadro de la señora está estable, tiene la medicación de forma diaria y eso está bajo el seguimiento incluso del médico del penal”, recalcó Helen Camacho, responsable del IDIF.
La valoración del IDIF de Añez fue realizada el lunes 9 de agosto. En base a ese informe es que la exmandataria fue llevada el miércoles a recibir una valoración cardiológica en el Hospital del Tórax.
Señaló que si bien la exmandataria presenta una elevación en la presión sistólica leve, “no amerita ninguna otra valoración ni internación”.
Respecto al estado evidente de Añez de pérdida de peso, la responsable del IDIF indicó que en el examen que se realizó a la exmandataria por parte del Instituto no se hizo esa medición.
“En el momento que hemos realizado la valoración con los medios que nosotros contamos, no hemos podido establecer el peso de la señora (…) Tampoco en el régimen penitenciario nos han permitido contar con un elemento”, señaló.
Consultada sobre el estado demacrado de Añez, la funcionaria dijo que “eso ya corresponde a la parte del estado emocional que presenta la señora, eso no es competencia de la valoración médica forense”.
Acotó que la interna del penal de Miraflores también se niega a ingerir la comida que se prepara en el recinto penitenciario.
En el examen a Añez en el Hospital del Tórax se recomendó realizar mayores estudios a la exmandataria, según informaron tanto Régimen Penitenciario y la abogada defensora.
La funcionaria del IDIF recalcó que de parte del Instituto no se ha sugerido estudios complementarios, porque la situación de Añez es estable, pero en el marco del respeto a los derechos, se solicitaría los estudios.
La exmandataria padece de hipertensión, pero también de síndrome ansioso-depresivo, según indicó Régimen Penitenciario.