Encadenado a una cama de hospital y luego de ocho años de privación de libertad, el dueño del extinto local Katanas, Marco Cámara, denunció que ha sufrido agresiones, tortura y cobros en la cárcel de San Pedro, específicamente en la sección Pinos.

En resumen, dijo que su tiempo en el penal ha sido “lleno de tortura, abuso y coimas”.

Señaló que ingresando a la cárcel ya tuvo problemas por no quiso pagar un monto de mil dólares de “seguro de vida”. Explicó que los delegados cobran este dinero a los internos que tienen dinero.

Además, señaló que paga Bs200 al mes de “alquiler” de una celda pequeña, que comparte con otra persona.

A esta precaria situación se suma que tiene problemas cardiacos, puesto que hace algunos meses fue operado tras sufrir un infarto.

Durante los ocho años de encierro, Cámara estimó que ha pagado unos 3.800 dólares para estar seguro y que no le hagan daño.

Sin embargo, a pesar de ello, denunció que ha sufrido alrededor de cinco agresiones en el interior de la cárcel.

En el último caso, relató que primero había visto cómo los delegados “plantaban” droga a sus contrincantes en la elección interna dentro del penal. Dijo que entonces lo habían amenazado para que calle.

Sin embargo, posteriormente fue agredido. Contó que intentó hablar con los delegados, pero fue golpeado en el pecho donde le habían operado y, además, fue impactado por la espalda con un bate.

Debido a esa agresión es que ahora Cámara está internado en el Hospital del Tórax, donde fue encadenado a su cama.

El dueño del Katanas denunció que este tipo de abusos son cometidos por los delegados del sector Pinos, a quienes acusó de comercializar droga dentro de la cárcel.

Según su testimonio, los delegados utilizan sus vínculos logrados por la venta de drogas para lograr su elección dentro del penal.

Denunció que los delegados son responsables de hechos delictivos dentro de la cárcel, como agresiones donde una persona con el brazo roto, además de violaciones.

Consideró que su situación en el penal ya es “insoportable”.

El abogado de Cámara, José Luis Medina, indicó que aún su cliente tiene una sentencia de 15 años de cárcel. Sin embargo, sostuvo que la condena es absurda y que pretende esclarecer lo sucedido.

Ratificó las denuncias de su cliente y señaló que esto ocurre especialmente por el contexto de elecciones que se realizarán en el penal.