JORNADA BOCHORNOSA
Título: 

Jhonny Fernández acaba derrotado y pierde el control del Concejo Municipal de Santa Cruz

Alcalde de Santa Cruz, Jhonny Fernández. Foto/RRSS

El alcalde de Santa Cruz de la Sierra, Jhonny Fernández, sufrió una dura derrota política al perder el control del Concejo Municipal, sumándose así al caso del alcalde de La Paz, Iván Arias, quien también concluye su gestión en mayo sin respaldo legislativo. La pérdida del órgano deliberante deja a Fernández debilitado a un año de finalizar su mandato.

La ruptura se consolidó tras la elección de la nueva directiva del Concejo, en la que resultó elegido presidente Israel Alcócer y como secretaria Silvana Mucarzel, ambos concejales que fueron expulsados por transfugio político por la Unidad Cívica Solidaridad (UCS) liderada por la autoridad municipal cruceña.

Pese a que el alcalde logró registrar ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) la expulsión de ambos ediles, los trámites no prosperaron para recuperar ambos curules que pertenecen a UCS y la recomposición política en el Concejo se consolidó.

Fernández había intentado sin éxito el curul a Mucarzel, quien hasta hace poco presidía el Concejo, alegando traición y falta de lealtad a la línea política oficialista. Sin embargo, ambos no solo conservaron sus escaños, sino que pasaron a controlar el ente legislativo con el apoyo de los opositores del alcalde.

La elección de la nueva directiva se dio en medio de tensión, gritos y empujones. Funcionarios del Ejecutivo municipal y seguidores de Fernández intentaron impedir la instalación de la sesión, lo que obligó a los concejales a trasladarse a otro ambiente dentro del edificio para completar el acto democrático.

La jornada fue descrita como una de las más bochornosas en la historia reciente del Concejo Municipal cruceño, marcada por pugnas internas del oficialismo que dejaron al descubierto una fractura política insalvable. Fernández cierra así su gestión bajo una nube de denuncias por presunta corrupción, falta de transparencia y pérdida de confianza ciudadana.

Con el control legislativo en manos de sus adversarios, el alcalde enfrenta un escenario de fuerte aislamiento político en el tramo final de su mandato.