La Paz despide al Pepino con emotivo adiós, cerrando el Carnaval pese al mal tiempo

A pesar de las lluvias y el clima adverso, el Carnaval paceño cerró este domingo con una emotiva despedida del emblemático Pepino, uno de los íconos más queridos de esta festividad. Miles de paceños se reunieron en las principales calles de la ciudad para acompañar al Pepino en su "entierro" simbólico, una tradición que pone fin a las celebraciones del carnaval.
Desde las 11:00 horas, comparsas de ch’utas y cholitas se concentraron en la Plaza Garita de Lima, ubicada en la zona Max Paredes, donde comenzaron a desfilar al ritmo de las bandas que animaron el ambiente a pesar de la lluvia, según despacho de la agencia de noticias municipales.
El Pepino, vestido con su característico traje rojo y blanco, encabezó el desfile de despedida, bailando por última vez con las cholitas que se sumaron al homenaje con sus danzas llenas de alegría.
La jornada, que coincidió con la celebración del Bicentenario de Bolivia, estuvo marcada por una mezcla de alegría y nostalgia. En un gesto cargado de emoción, el Pepino fue llevado hasta el ataúd que esperaba en la Avenida Baptista, rodeado de al menos 60 grupos de danzantes que unieron fuerzas para rendir homenaje al personaje.
El cortejo fúnebre fue liderado por el secretario municipal de Culturas, Américo Gemio, quien estuvo acompañado por las soberanas del carnaval y los asistentes, que coreaban a viva voz: "¡No te vayas, Pepino!" En medio de los colores, risas y música que llenaban el aire, la despedida del Pepino se convirtió en un acto simbólico que representó la esencia misma del Carnaval paceño: una celebración de la tradición, la cultura y el espíritu festivo de la ciudad.
Al llegar al Cementerio General, el Pepino miró hacia atrás, dejando atrás a sus bailarines y el bullicio del carnaval, hasta la próxima edición de la festividad en 2026. Sin embargo, su presencia siguió viva en cada uno de los danzantes, que continuaron con la tradicional entrada de ch’utas, una de las comparsas más representativas, que estuvo acompañada de nombres originales y creativos.
Aunque las inclemencias del tiempo intentaron opacar la festividad, el Carnaval de La Paz cerró con éxito y con una emotiva despedida que reafirmó el vínculo profundo entre la ciudad y sus tradiciones.