El candidato al Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), Israel Campero, aseveró que los fallos de salas constitucionales de Beni y Pando contra las Elecciones Judiciales no vinculan al Órgano Electoral, por lo cual esta entidad podría hacer “caso omiso”.

Las salas constitucionales de Beni y Pando declararon desierta las convocatorias para elegir magistrados del TCP y del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), bajo el argumento de que se vulneraron derechos de postulantes en la etapa de preselección realizada en la Asamblea Legislativa.         

Campero, que también fue vocal constitucional, explicó que el fallo de la Sala de Pando tenía como accionado a la Asamblea Legislativa, por lo cual no afecta al Órgano Electoral.

En el caso del fallo en Beni, Campero sostuvo que tampoco vincula al Órgano Electoral porque las supuestas lesiones de derechos fueron del Órgano Legislativo.

Criticó la decisión de la Sala de Beni y denunció que “ha sido el ejemplo más grande de la arbitrariedad”, puesto que ni siquiera se notificó a todos los candidatos que eran interesados en el caso.

Campero mencionó, asimismo, que la resolución del tribunal del Beni no tomó en cuenta el principio de preclusión, por el cual no se puede retroceder en las etapas de un proceso electoral. “Significa que se han cerrado etapas y no pueden volver a ser revisadas”, acotó.

En ese marco, dijo que el Órgano Electoral “tiene la posibilidad de hacer incluso caso omiso a la decisión de un tribunal de garantías que no ha sabido observar los parámetros de la decisión y la pretensión del accionante”.

Por su parte, informó que con otros postulantes están analizando presentar denuncias administrativas o penales, porque no pueden “dejar pasar una arbitrariedad de estas características” de parte de la Sala Constitucional de Beni.

En su momento, cuando era vocal, Campero también emitió resoluciones en contra del Órgano Electoral en el caso del conflicto por la sigla del MAS-IPSP. Entonces, la Sala de Campero en La Paz instruyó que el TSE supervise el congreso realizado por el ala "arcista", decisión que fue cuestionada por opositores y "evistas" que calificaron al entonces vocal como operador del Gobierno.