En medio de la tensión antes del bloqueo de transportistas, el presidente Luis Arce se ha pronunciado para pedir a este sector que deje las vías expeditas para el paso del diésel, porque de lo contrario implicaría que sus intenciones son políticas.

El mandatario anunció que este jueves comenzaría el desembarco del combustible desde buques en el puerto de Arica, después de que las condiciones climatológicas lo habían impedido. Dijo que el viernes se enviarían las cisternas y el sábado se procedería a vender ese combustible en el país.

Sin embargo, señaló que los transportistas deberían levantar los bloqueos para permitir la distribución del diésel. Recalcó que ir a bloquear no es la solución para este tema.

“Lo que debería ocurrir en el país, para tranquilidad de toda la población y está en manos del transporte pesado, deberían dejar expeditas las vías de acceso de todo el diésel, la gasolina al país. Eso es lo que el pueblo boliviano, yo pienso, hoy estaría pidiendo”, afirmó,

El mandatario reiteró que, de no dejar expeditas las vías, se denostaría que la intención de las medidas de presión sería política, trayendo a colación el pedido de acortamiento de mandato que ha surgido en este contexto.
     
Ya hubo sectores del transporte que advirtieron con pedir que se adelanten las elecciones generales, en caso de que el Gobierno no solucione la situación económica y de abastecimiento de diésel.

Arce denunció que la intención detrás de estos pronunciamientos es desestabilizar al Gobierno. “Que planteen los ultimátums, de que si no pasa esto vamos a pedir el acortamiento de mandato, eso es una posición política”, dijo el mandatario.

Consideró que existe una coincidencia en que también hubo movilizaciones del transporte pesado antes de los hechos del 26 de junio, que calificó de “golpe de Estado fallido”.

“La experiencia siempre nos ha dicho que lamentablemente el transporte pesado ha sido un actor fundamental en todo tipo de situaciones, no es una novedad”, agregó.

El transporte pesado ha declarado paro nacional indefinido desde este miércoles, mientras que la Confederación de Choferes ha convocado a un paro de 24 horas este jueves 1 de agosto, en protesta por la falta de diésel, los problemas económicos, y falta de cumplimiento de acuerdos.