El exministro de Gobierno de Evo Morales, Carlos Romero, lanzó duras críticas contra la administración actual del presidente Lucho Arce, del vicepresidente David Choquehuanca y del ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, a quien acusó de ser un “pez gordo del narcotráfico” por presuntamente encubrir a operadores de esta actividad ilícita.

Horas antes de estas declaraciones, Romero fue correteado por un grupo de personas al llegar al aeropuerto de Cochabamba en el cual soltó su gafas que fueron recogidas del suelo mientras intentaba escapar del ataque.

Luego el exministro fue expulsado a empujones de la terminal aeroportuaria, según videos que circularon en redes sociales.

Posteriormente, en una entrevista de prensa, Romero criticó al gobierno por no haber reemplazado al gas como motor de acumulación económica y por la paralización de las plantas de industrialización del litio.

En torno a la gestión económica, afirmó que el presidente optó por solicitar préstamos en un momento en que los intereses eran altos. Romero afirmó que, al inicio de su mandato, Arce rechazó préstamos concesionales ofrecidos, optando más tarde por créditos más costosos de organismos multilaterales y del sistema de pensiones.

El exministro argumentó que depender de préstamos compromete la soberanía nacional, ya que, si el país no logra cubrir sus deudas, organismos internacionales podrían imponer medidas como las privatizaciones, similar a lo ocurrido en periodos neoliberales.

También dijo que “el gobierno está desmantelando las instituciones del Estado; ha destrozado la justicia y ha hecho un pacto de impunidad por los escandalosos casos de corrupción. La familia de Arce Catacora, incluyendo a sus tres hijos, su mujer, cuñados y primos, están saqueando el Estado boliviano”.

Además, mencionó al vicepresidente Choquehuanca y a su hijo, acusándolos de corruptos por supuestamente vender una mansión, y acusó a los funcionarios gubernamentales de repartirse licencias de rescate de oro en el norte amazónico del país.

Sobre el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, Romero aseveró que ya es un importante actor en el narcotráfico.

Igualmente se refirió al ministro de Justicia, Iván Lima, a quien calificó de “corrupto y cínico”, acusándolo de utilizar el bufete de su hermano para liberar procesos judiciales de Manfred Reyes Villa, quien, según Romero, es un “paramilitar, corrupto y ladrón que ha vivido a cuerpo de rey durante más de 10 años”.