El capitán de la Policía, Javier Alberti, fue presentado este martes por un caso de robo agravado. Los antecedentes de este oficial datan de hace más de una década, con casos de hasta narcotráfico, pero seguía ejerciendo en la entidad del orden.

En su presentación en el Comando de la Policía, Alberti a los gritos aseguraba su inocencia y lanzó una acusación contra el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC).

Alberti fue recluido en Palmasola en 2009 por el transporte de 59 kilos de cocaína, detalló en ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo. 

En 2015, tuvo un caso de extorsión. Así también en 2021 fue acusado de extorsionar a transportistas en Challapata. 

En 2022, el capitán fue denunciado por traficar vehículos robados en Chile y fue aprehendido por legitimación de ganancias ilícitas. 

El año pasado fue enviado a la cárcel, pero en tres semanas logró su arresto domiciliario por disposición del juez Elmer Laura.

En su prontuario también tiene casos de tránsito, lesiones y amenazas.

En el plano disciplinario dentro de la Policía, Alberti tiene cinco casos vigentes, de los cuales tres cuentan con acusación. Sin embargo, 10 procesos fueron archivados y el Ministro de Gobierno anunció que se investigará a los funcionarios responsables de esas decisiones. 

En el último caso, Alberti fue aprehendido el martes en la calle Comercio de La Paz.

Está procesado por el delito de Robo Agravado, puesto que fue filmado en Santa Cruz cuando, junto a otro policía, redujo a un ciudadano al piso para aparentemente escudriñar sus pertenencias. 

Además, en ese caso se trasladó en un vehículo chuto con placas clonadas.

El cómplice de Alberti en este caso es otro capitán de Policía, que ya fue enviado al penal de Palmasola.

PRESENTACIÓN ACCIDENTADA 

El Ministro había advertido que Alberti estaba en una actitud violenta, pero de todas maneras la Policía lo presentó ante los medios.

A pesar de estar enmanillado, el capitán se opuso por la fuerza a ser presentado. Varios efectivos tuvieron que reducirlo y obligarlo a ponerse delante de las cámaras. 

"No soy un delincuente", gritaba Alberti.

Acusó al director de la FELCC, el coronel Sergio Fernando Bustillos. "Él me mandaba a recoger sus autos. Fernando Bustillos y toda la FELCC", exclamó. 

También se dirigió a Del Castillo: "Señor ministro, no soy yo". "Me han armando un caso". "Me han engañado".