Murillo enfrenta otro proceso por legitimación de ganancias ilícitas e imputan a dos implicados
Arturo Murillo, exministro de Gobierno, fue incluido en la investigación por legitimación de ganancias ilícitas en el caso de los movimientos irregulares de dinero de la exautoridad. Daniel Aliss, su excuñado, y el capitán de Policía Daniel Bellot, su exedecán, fueron imputados y otro uniformado con grado, también de capitán, comparece en el Ministerio Público.
El fiscal coordinador Sergio Bustillos informó que los dos primeros investigados se acogieron a su derecho al silencio. En la audiencia de medidas cautelares se solicitará su detención preventiva en la cárcel de San Pedro.
En este mismo caso, Murillo fue incluido por el delito de legitimación de ganancias relacionado al origen y movimientos económicos por el otro proceso relacionado a la compra de material antidisturbios en la gestión de Jeanine Añez.
“Al momento tenemos cuatro personas que están siendo investigadas, dos oficiales de la policía, un cuñado y el señor Murillo que está siendo investigado en este proceso de legitimación de ganancias ilícitas”, afirmó Bustillos.
El excuñado Aliss Paredes fue aprehendido e 26 de mayo en la ciudad de Cochabamba y luego trasladado a la ciudad de La Paz. Se presume que fue la persona autorizada para realizar la apertura de cuatro cajas de seguridad en una entidad financiera a nombre de Murillo. Al menos cuatro ocasiones habría acudido a la entidad financiera para retirar dinero.
En el caso de Bellot, fue vinculado al caso tras haber realizado un depósito de Bs 100.000 a la cuenta del exministro. El capitán de Policía Ivar Víctor Gómez, exjefe de seguridad de Murillo, se encuentra declarando en la Fiscalía por el mismo hecho.
Según Bustillos, Bellot habría pedido a Gómez depositar a las cuentas de Murillo Bs 100.000, el mismo día en el que la exautoridad transfirió a Estados Unidos Bs 1,7 millones.
Una investigación acabó con la detención de la exautoridad en Estado Unidos. El proceso que enfrenta es por el pago de sobornos y lavado de dinero obtenido de un negociado en la compra de material antimotín a través de un intermediario. Se canceló $us 5,6 millones, de los que $us 2,3 millones fueron el sobreprecio.