Por Iván Ramos - Periodismo que Cuenta

En un giro significativo que reivindica la exactitud histórica, la Alcaldía de Sucre ha decidido corregir la fecha de nacimiento de Juana Azurduy Llanos de Padilla, excluyendo el 12 de julio de las conmemoraciones oficiales. 

Este cambio se debe a las investigaciones exhaustivas realizadas por Norberto Benjamín Torres, Hugo Canedo y Fernando Suárez, quienes revelaron que la heroína no nació en julio, sino en enero de 1780.

"Es un triunfo para la historia y la verdad", expresó Fernando Suárez, quien respaldó la investigación con una carta dirigida a las autoridades, en la que precisó que Juana Azurduy nació el 26 de enero de 1780. Norberto Benjamín Torres inició estos hallazgos con documentos fundamentales, incluyendo certificados de bautizo y matrimonio, que demostraron la inexactitud de la celebración en julio.

Torres explicó que Azurduy fue bautizada en la Iglesia de San Pedro de Tarabuco, en una ceremonia comunitaria junto a otros niños. "La fecha de bautismo es lo que conocemos con precisión, no tanto la fecha de nacimiento. El certificado de bautismo indica el 26 de marzo de 1780, pero fue bautizada cuando tenía dos meses de edad. Esa es la información que proporciona el documento", detalló Torres.

El ajuste en el calendario de conmemoraciones se fundamenta en estos documentos históricos. Suárez subrayó la importancia de esta corrección, afirmando que, dado que Juana Azurduy fue bautizada el 26 de marzo y considerando que tenía dos meses de edad, la fecha correcta para rendirle homenaje debería ser el 26 de enero.

La rectificación de la Alcaldía de Sucre no solo pone fin a un error histórico de larga data, sino que también honra con mayor exactitud a una de las figuras más emblemáticas de la lucha por la independencia en América Latina. Este cambio en la fecha de conmemoración es un paso crucial hacia el reconocimiento preciso de la vida y legado de Juana Azurduy Llanos de Padilla, la "Juana de América", asegurando que su memoria se celebre de acuerdo con la verdad histórica.

Los investigadores, satisfechos con la corrección, esperan que esta medida inspire a otras instituciones a revisar y validar sus registros históricos, promoviendo una comprensión más precisa y respetuosa de los personajes que han forjado nuestra historia.