El jefe del MNR, Luis Eduardo Siles, surgió este domingo al presidente Luis Arce dar marcha atrás en la Gestora Pública ante la masiva desconfianza de la clase trabajadora y para evitar que las fuentes de corrupción y desvío de fondos deriven en el surgimiento de un “ejército de Dantes Escobar”, tal como ocurrió en el fondo Complementario de Seguridad Social de la Administración Pública (Focssap).

Recordó que el gobierno de Sánchez de Lozada trajo en 1997 las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFPs) ante la corrupción del exFondo, donde Dante Escóbar era director y desvió a su cuenta personal 10 millones de bolivianos para comprar con sobreprecio 25 hectáreas en el exfundo Ventilla en El Alto.

Escobar y otros dirigentes quebraron el Focssap y el Fondo del Retiro del Empleado Público (Frep), encargados de manejar aportes de los futuros jubilados, para luego fugar del país y convertirse en 1997 en el hombre más buscado por la justicia siendo capturado en Argentina y extraditado a Bolivia para ser recluido en la cárcel de San Pedro.

Siles señaló que tomando en cuenta este antecedente, es justificable la desconfianza porque sigue en la memoria de la gente el anterior sistema de pensiones bajo control del gobierno, donde cada vez menos trabajadores aportaban a un fondo común para mantener a más adultos mayores.

Indicó que actualmente en el país la corrupción está igual que en las épocas de Dante Escobar y por eso la clase aportante no quiere que sus ahorros de toda su vida se pierdan en una Gestora Pública, que ya nació con números rojos al haber perdido un juicio y debe pagar 100 millones de dólares a una AFP.

Manifestó que la desconfianza en el gobierno es tan grande, primero porque algunas autoridades de la Gestora no tienen capacidad para manejar 23.000 millones de dólares y, segundo, porque sin haber tomado control, el gobierno ya se prestó 1.000 millones de dólares.

“Esto va a ser un asalto a mano armada, va a haber un ejército de Dantes Escobar, masistas y no masistas que se van a acabar la plata de los bolivianos y de aquí a cinco años, cuando Arce ya no esté en el poder, el próximo gobierno sea quien sea, dirá que la responsabilidad fue del anterior gobierno”, indicó.

Dijo que es un tema extremadamente grave y si los futuros jubilados no se dan cuenta, como lo hicieron los mineros de Huanuni, será el acabose de muchas generaciones y “por eso me permito implorar que el presidente Arce dar marcha atrás en esta medida desacertada que puede perjudicar irreversiblemente el patrimonio de miles de bolivianos”.

Explicó que actualmente las AFPs tienen el dinero que se puede ver y contar, pero si asume la Gestora en poco tiempo ese dinero se va a perder porque el gobierno los utilizará para tapar el déficit de las empresas públicas, financiar la deuda del Tesoro General del Estado y el salario de los funcionarios públicos.