PRIMERO SU FAMILIA Y SOL.BO DESPUÉS
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Revilla se despide con inspección a una obra y espera que Arias lo invite al acto de inauguración

Viaducto Tejada Sorzano en las afueras del Estadio de Miraflores. Foto/GAMLP

El alcalde de La Paz Luis Revilla se despidió este domingo del trabajo de campo con una inspección al viaducto del Estadio de Miraflores y anunció que a partir de este lunes se dedicará a su familia, buscará trabajo y dejará para después el futuro de Sol.bo, tras casi 11 años de vida política en el gobierno municipal.

Revilla informó que deja la obra con un 90 por ciento de avance y estima que la totalidad del viaducto se entregue en los siguientes 20 días, dado que la empresa tiene plazo hasta el 8 de junio.

El alcalde electo Iván Arias solicitó en reiteradas oportunidades a Revilla, que deje de presionar a la empresa constructora para entregar a como de lugar el viaducto antes que concluya su gestión. A cambio prometió invitarlo al acto de inauguración si quiere poniéndole una silla de oro para que esté entre los invitados.

“Esperemos como lo ha comprometido el alcalde electo nos invite a la inauguración que con todo gusto estaremos presentes (…) Con esto estamos también poniendo fin a nuestra gestión municipal de 11 años ininterrumpidos. Orgullosos de lo que hemos avanzado, orgulloso de haber sido alcalde de la ciudad de La Paz y mañana (lunes) en horas de la tarde está previsto el acto de transmisión de mando, estaremos para cumplir con esa forma y despedirnos de la ciudad de La Paz”, manifestó.

Explicó que la construcción de viaducto con varios beneficios de esparcimiento y parqueo de vehículos, comenzó a través de un proceso de licitación el año 2018 con una inversión de 110 millones de bolivianos; sin embargo, debido a las dificultades generadas por la pandemia y la cantidad de servicios que tuvieron que cambiarse no se pudo terminar en el tiempo previsto.

Anunció que en próximas horas viajará a Cochabamba a visitar a su señora madre, luego irá junto a su esposa a la ciudad de Santa Cruz para que su hija también pueda estar con su familia política y dijo que verán dónde concretar algunas ofertas laborales.

“Hay algunos ofrecimientos de proyectos de asistencia técnica a los municipios, eso lo veremos en los siguientes dos meses y veremos donde son las mejores posibilidades”, explicó.

Dijo que el tema político lo verá con más calma hacia adelante y después de descansar unos meses y de pensar las cosas con cabeza fría, se reunirá con sus dirigentes de todo el país para evaluar los aciertos y los errores.

Asegura que deja la alcaldía con el 94 por ciento de planimetrías aprobadas en la mancha urbana. Está en fase de construcción el quinto hospital de segundo nivel en la zona de Villa San Antonio, 20 barrios de verdad aprobados, además de otras obras de infraestructura que requieren de seguimiento de la gestión entrante.

Indicó que el nivel de la deuda no es de 500 millones de bolivianos como dijo el alcalde electo, sino de 300 millones que, según afirmó, con una política adecuada se puede cubrir hasta fin de año, de tal manera que el próximo año el nuevo alcalde pueda implementar sus planes de gobierno.

Aclaró que la deuda no es un tema exclusivo de la alcaldía de La Paz sino también de otros en el interior del país, que han visto reducidos sus ingresos por coparticipación tributaria y otras causas, como la pandemia, que no permitió cobrar impuestos a tiempo.  

Reiteró que no tiene planificado salir fuera del país, por lo que considera innecesario imponerle un arraigo, además que, por mandato de la Ley del Arraigo promulgada por la entonces presidenta de la Asamblea Legislativa Eva Copa, ningún funcionario puede salir del país los próximos tres meses.

Alcalde saliente Luis Revilla espera recibir invitación para el acto de inauguración. Fotos/GAMLP