Después de algunos días de haber retornado al país, Mario Cossío Cortez, conocido como el primer gobernador de Tarija, afirmó que no robó ni un centavo cuando ejerció el primer cargo ejecutivo departamental y que al contrario, entregó su vida al país y por ello se empobreció.

“Me empobrecí sirviendo al país, no lo digo como un verso, puedo documentarlo y demostrarlo”, manifestó en entrevista con la red ERBOL el político que estuvo exiliado por varios años en el vecino Paraguay.

El también abogado remarcó que no llegó a la política para enriquecerse y aseguro que no tiene bienes, que no tiene empresas.

Cossío también se declaró como “una de las más grandes víctimas” de un régimen que, en sus palabras, trató de acabar con él.

Sostuvo que el Poder Judicial no fue un órgano independiente y que que fue subordinado para abrirle camino a la “dictadura”. Ese camino era abierto en la medida que se anulaba a los líderes opositores, agregó.

El político tarijeño, quien fuera presidente de la Cámara de Diputados en 2003, se considera primero ciudadano antes que político y dice que por esa misma razón no entendía cosas y conductas del sistema político.

“Los que vienen a la política tienen que venir con convicción de servicio y de entrega”, afirmó el político en relación a los hechos de corrupción que golpearon el país antes y durante el gobierno del MAS.

En relación a su salida del país, Cossío anotó que “han pasado 10 años, no pudieron condenarme, quisieron ciertamente eliminarme. Me siento en paz, me siento en libertad de caminar por el país”.

Cossío enfrenta varios procesos penales, entre ellos se lo sentenció en 2019 por los delitos enriquecimiento ilícito y favorecimiento al enriquecimiento ilícito, debido a que habría adquirido 24 inmuebles y cinco vehículos, lo cual no se adecúa a sus ingresos, según la investigación de la Fiscalía.  

 “Necesitamos un gobierno fuerte”

Pasada la página de su exilio, la exautoridad ve que la transición debe ser limpia y que posteriormente se necesita un gobierno fuerte con legitimidad y que sea propositivo.

“Necesitamos conformar un gobierno fuerte, sólido, que tenga alta legitimidad, altamente propositivo, que le proponga al país algo diferente”, subrayó.

Cossío, de igual modo, consideró que “le está faltando al país debatir y entrar a una revolución moral”.

En ese contexto señaló que no hay democracia sin partidos pero llama la atención que “lo que les está faltando a los partidos es entender la realidad”

Respecto a su rol en octubre de 2003, Cossío dice que fue elegido presidente de Diputados cuando Goni había perdido poder, sin los votos del grupo de Sánchez de Lozada e incluso con algunos votos del MAS. 

En cuanto a aquella crisis, reconoció que los propios partidos han “hecho méritos” para que “pase lo que pasó”. 

“Goni tiene cosas que decirle al país y ojalá tenga la oportunidad de hacerlo”, apuntó.