DOMINGO DE PASCUA
Título: 

Iglesia pide que Cristo resucitado restaure la fe, la esperanza y el amor en los bolivianos

Obispo Auxiliar de Santa Cruz, Monseñor Estanislao Dowlaszewicz. Foto/captura

La Iglesia Católica celebró el Domingo de Pascua haciendo votos para que Cristo resucitado restaure la fe, la esperanza y el amor en los bolivianos para que dejen de lado la “esquizofrenia religiosa” de apoyar por un momento la victoria de la vida sobre la muerte y luego apoyen la civilización de la muerte.

El Obispo Auxiliar de Santa Cruz, Monseñor Estanislao Dowlaszewicz, presidió la misa, destacando que la Semana Santa es un testimonio de la vida, pasión y muerte de Jesucristo para redimirnos del pecado.

En su mensaje, hizo hincapié en la importancia del testimonio coherente y perseverante. Recordó cómo los apóstoles fueron fieles testigos de la resurrección de Jesús, lo que contrasta con la falta de testimonio firme en la actualidad, donde algunas personas caen en una especie de esquizofrenia religiosa.

Explicó que muchos participan activamente en celebraciones como las procesiones de Semana Santa y la Vigilia Pascual, demostrando su apoyo a la victoria de la vida sobre la muerte.

Dijo que algunos el Viernes Santo han besado y han tocado la cruz, otros el domingo de Ramos han gritaron ¡Hosana, bendito el que viene en nombre del Señor! Y puede ser que varios estuvieron en la vigilia pascual con las velas encendidas renovando la fe, incluso puede ser que algunos llevaron el agua bendita a su casa en un signo de apoyo a la victoria de Cristo.

Sin embargo, lamentó que estas mismas personas luego cambien tan rápido de actitud para promover la cultura de la muerte en lugar de la vida.

Monseñor Dowlaszewicz recordó la victoria de Cristo sobre el pecado, Satanás y la muerte, y alentó a que la alegría de la resurrección conduzca a una renovación de la fe y la esperanza en la vida eterna.

La celebración del Domingo de Pascua fue un recordatorio para los fieles de la importancia de vivir de manera coherente con los valores cristianos y de mantener viva la esperanza en la resurrección de Cristo.