El ministro de Gobierno Carlos Romero informó que los servicios de Inteligencia de la Policía Boliviana detectaron la presencia de grupos violentos con dinamita e instrumentos contundentes en las movilizaciones callejeras que se produjeron la noche de este miércoles en La Paz, en el marco de los conflictos poselectorales.

La denuncia fue hecha pública en previsión a una posible confrontación que iba a ser provocada por los manifestantes que se dirigieron a inmediaciones del Tribunal Supremo Electoral en la plaza Avaroa, con la finalidad – según dijo - de provocar daños al patrimonio público.

Apoyado en los mismos reportes de Inteligencia, dijo que para esta movilización en la sede de Adepcoca en la zona de Villa Fátima, se distribuyeron unos 400 cartuchos de dinamita a los cocaleros de Yungas quienes respaldan a Franclin Gutiérrez, dirigente sindical encarcelado hace un año a denuncia del gobierno en un proceso penal que no avanza.

Romero dijo que ponen en conocimiento de la ciudadanía paceña, de la población en general y de la comunidad internacional sobre la presencia de estos grupos, con el fin de deslindar responsabilidades de parte del gobierno.

“La instrucción a la Policía es de contención”, precisó el ministro Romero a tiempo de asegurar que pese a tener la información no se aprehendió a nadie en la marcha que se registró en horas de la noche.

Al finalizar la protesta en la plaza Avaroa, no se observaron las consecuencias anunciadas por la autoridad; sin embargo del lado de los manifestantes se denunció que en la marcha detuvieron  a dos infiltrados con dinamita y que fueron entregados a la Policía Boliviana.

Dijo que como gobierno estos días soportaron permanentemente acciones de grupos violentos con gente contratada en Sucre, Santa Cruz y Cochabamba, donde se llevan jóvenes con tendencia al consumo de alcohol y las drogas para provocar violencia, desmanes y destrozos a la propiedad pública.

Tras las elecciones del domingo, grupos de manifestantes que apoyan la candidatura de Carlos Mesa salieron en protesta en varias ciudades del país, debido al cambio del resultado que en principio anunciaba la segunda vuelta electoral y que 24 horas el Tribunal Supremo Electoral descartaba esa posibilidad, proyectando el triunfo en primera vuelta del presidente Evo Morales.