RECUERDA LA NACIONALIZACIÓN
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Evo dice que no le tembló la mano para nacionalizar los hidrocarburos pero sí se negó a estatizar la banca

Evo Morales recuerda los 16 años de la nacionalización de los hidrocarburos. Foto/captura video

El expresidente Evo Morales manifestó esté sábado ante un ampliado de la Federación Trópico en el municipio de Villa Tunari, que algunos ministros de su gabinete de 2006 no querían la nacionalización de los hidrocarburos por temor a las demandas al Estado boliviano ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), pero a que a él no le tembló la mano para firmar el decreto.

Dijo que después de su autobiografía “Mi vida: de Orinoca al Palacio Quemado”, prepara un segundo libro en el que no identifica a sus colaboradores en el gabinete que tuvieron reparos al decreto de nacionalización de los hidrocarburos firmado el 1 de mayo de 2006.

“En este libro no estoy contando todavía. Yo sé todo, Álvaro sabe. Había ministros (que) no querían la nacionalización, tenían miedo a la nacionalización. ¿Qué decían? Si nacionalizamos nos pueden llevar al CIADI donde siempre gana el privado. Yo qué dije, nos retiramos del CIADI, cualquier demanda: en nuestro territorio”, manifestó.

Según Morales, el 1 de mayo de 2006 empieza la liberación económica para Bolivia a decir de los datos económicos porque el Producto Interno Bruto (PIB) pasó de 9.000 millones de dólares a 42.000 millones de dólares y la inversión estatal subió de 600 millones de dólares/año en 2005 a 8.000 millones de dólares en los siguientes años.

Explicó que la mañana de este sábado habló con su exvicepresidente Álvaro García Linera para recordar sobre las utilidades a la banda privada.  Manifestó que cuando llegaron al gobierno, la banca reportó utilidades en el orden de 40 millones de dólares de los que solo 4 millones pagaban al Estado.

Luego comentó que, gracias al movimiento económico de esa época, la banca privada ganó 100 millones de dólares y entonces tomó la decisión de llamar a los banqueros para comunicarles una buena y una mala noticia.

Precisó que la mala noticia era que enviaría una ley a la Asamblea Legislativa para que la mitad de sus ganancias sea para el pueblo boliviano y la buena era que no tomaría la decisión de estatizar la banca, aunque confesó que “algunos loquitos querían estatizar la banca” y que él se opuso por ser propiedad privada.

Morales espera que la nacionalización sea festejada por sus seguidores porque significó el trabajo de un gobierno fuerte que tomó una decisión importante para la vida económica en favor del país.