El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB) Juan Carlos Huarachi informó que la entidad sindical se ha declarado en emergencia ante la “persecución judicial” a los dirigentes a nivel nacional.

Explicó que en su caso particular recibió dos citaciones del Ministerio Público para que comparezca este viernes en declaraciones distintas en las ciudades de La Paz y Oruro.

Dijo que la justicia lamentablemente no está funcionando porque hay dirigentes perseguidos, detenidos y en particular de Ernesto Quispe que fue aprehendido en El Alto por fuerzas policiales.

Huarachi indicó que, en medio del auto de buen gobierno, antes de las elecciones, fue citado en su propio domicilio en el distrito minero de Huanuni-Oruro como “si fuera delincuente o ladrón”.

Aseguró que se presentará ante los investigadores sobre el bloqueo de caminos y otros cargos, pese a que una Acción de Amparo salió a su favor porque entendió que sus actos se enmarcaron al derecho a la protesta, además que las acusaciones del Ministerio Público carecían de pruebas.

Reveló que la Fiscalía ha requerido la lista de diferentes afiliados a la Central Obrera Boliviana y por ese motivo el ente sindical se ha declarado a partir de este jueves en estado de emergencia nacional para no permitir que exista persecución porque los dirigentes ya no tienen garantía de estar caminando libremente en las calles.