En su ampliado en La Paz, la Central Obrera Boliviana (COB) decidió seguir el conflicto contra la Asamblea Legislativa, con la continuidad de la vigilia que instaló en la plaza Murillo, además de advertir con intensificar las medidas de presión con paros escalonados y finalmente la huelga general indefinida.

“Si tenemos que radicalizar, vamos a radicalizar”, dijo el ejecutivo de la COB, Juan Carlos Huarachi.

La COB exige a la Asamblea aprobar los proyectos de créditos internacionales, además de las leyes sociales, como la reforma a la ley de pensiones.

La vigilia en Plaza Murillo se realiza desde el martes, pero Huarachi señaló que sus afiliados están pidiendo las nuevas medidas, que podrían ser paro de 24 horas, luego de 48 horas y llegar hasta las 72 horas.

Enfatizó que por ahora no se está asumiendo una huelga general, porque afectaría a la población, pero sí se piensa en tomar medidas “paso a paso”.

Según la resolución, en el próximo ampliado se definiría realizar los paros escalonados por parte de la COB, hasta que la Asamblea cumpla sus pedidos.

Huarachi reprochó al Senado por haber suspendido una sesión ante la amenaza de toma que hizo anteriormente el líder de la COB. Negó que se vaya a asaltar el Legislativo cuestionó que los parlamentarios tengan miedo.  

También se instruyó a las departamentales que se organicen las  medidas de acción y de presión para fortalecer la lucha social. 

Además, Huarachi informó que se están solicitando audiencias con los presidentes de las Cámaras, pidiendo dar prioridad al tratamiento de estos proyectos de ley. Asimismo, esperan la reunión con presidente del Estado.

En el ampliado, la COB también exigió al gobierno central tomar medidas inmediatas contra de las quemas que están sucediendo en el Oriente del país y solicitar apoyo internacional.

En esa línea, se exigió a la Asamblea que de forma urgente analice, sin perjudicar a los sectores involucrados, la forma de derogar las leyes que están provocando los incendios.