Los carpinteros de Bolivia anunciaron el lunes, que tras un ampliado nacional realizado de manera virtual, se declararon en quiebra tras el impacto económico de la cuarentena. Por ello exigen políticas al Estado para paliar los efectos de la pandemia en el sector además del cumplimiento de la normativa relativa a los créditos.

“Los carpinteros de Bolivia nos declaramos en quiebra ya que no existen políticas de Estado para paliar esta cuarentena y tuvimos que vaciar nuestros pequeños ahorros fracturando nuestra capital de operaciones para subsistir en esta pandemia”, expresó el ejecutivo de la Confederación Nacional de Carpinteros, Ebanistas y Artesanos en madera del país, Lucio Ticona. 

Detalló que el pasado viernes tuvieron un ampliado nacional virtual de todos los departamentos donde resolvieron varios puntos, entre ellos que la ASFI y las entidades financieras respeten la normativa sobre créditos recordando que las leyes tienen mayor rango que un decreto.  

En ese contexto pidieron a la Asamblea Legislativa Plurinacional una ley interpretativa a la ley 1294, “donde sea taxativa en el tiempo de diferimiento pos estado de emergencia sanitaria enmarcado en la ley 1294 y de esta forma favorecer y reactivar las en las unidades productivas”.

La entidad matriz  de los carpinteros, también está integrada por la Federación de Artesanos Trabajadores en Madera (FATMA) que realizó su demanda desde la ciudad de El Alto.

Otra de las representantes advirtió a las autoridades: “Están jugando con las personas, con los artesanos, (…) de todas las notas que se ha enviado, si el Gobierno no nos va a tomar en cuenta vamos a tomar medidas de hecho y medidas legales, según corresponda”.

Recalcaron al Gobierno que no “fracturen” la ley sobreponiendo decretos. “Exigimos el respeto a la ley 4216 donde indica la reactivación y fomentar el sector productivo”, acotaron.