El Gobierno de Bolivia denunció a España, ante la comunidad internacional y organismos como Unión Europea y la ONU, por haber atropellado su soberanía y abusar de privilegios diplomáticos. 

Esto debido a que encapuchados, presuntamente armados, usaron vehículos diplomáticos de la delegación española para intentar ingresar a la residencia de México en La Paz.

El reclamo surge debido a que, cerca al medio día de este viernes, la Policía identificó a sujetos con el rostro tapado que estaban en vehículos de la Embajada de España, que pretendían ingresar al condominio en el cual se encuentra la residencia mexicana, donde se asilan exautoridades ligadas al MAS.

Mediante un comunicado leído por la canciller Karen Longaric, el Gobierno boliviano denunció que el personal diplomático español intentó ingresar a la residencia, junto a los encapuchados, “de manera subrepticia y clandestina”.

Aclaró que, si bien se permitió el ingreso del personal diplomático español, la Policía frenó a los vehículos donde estaban los encapuchados, porque su presencia representaba una potencial amenaza.

“Las acciones del personal de la Embajada de España vulneran la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, que en su Artículo 41 numeral 1 señala que las personas que gozan de privilegios e inmunidades deben respetar las leyes y reglamentos del Estado receptor y no deben inmiscuirse en los asuntos internos de éste”, dice el comunicado.

El Gobierno boliviano señaló que “el personal diplomático y de seguridad de la Embajada de España en Bolivia no tiene autorización para portar armas de fuego ni usar atuendos que oculten su identidad”.

Acusó además a la delegación española de “hacer mal uso de las inmunidades de los privilegios y de las garantías que el Estado boliviano reconoce y otorga a cualquier misión diplomática”.

“Estos atropellos afectan profundamente la dignidad y soberanía del Estado boliviano, la seguridad nacional y ponen en riesgo la integridad física de los huéspedes temporales, el propio personal mexicano y de los vecinos de la zona”, advirtió el Estado boliviano.

La canciller Longaric informó que la nota del Gobierno boliviano fue enviada a Ministerio de Exteriores español, pero también a todas las delegaciones diplomáticas en Bolivia, además de organizaciones internacionales como la OEA, UE, el Parlamento Europeo y ONU.

Longaric preguntó por qué motivo la ministra consejera de España visitó a la embajadora de México, acompañada de personas con el rostro cubierto y presumiblemente armadas.

La residencia de México también es objeto de la polémica entre el Gobierno de Manuel López Obrador y el de Bolivia, debido a que el Estado mexicano denunció una excesiva presencia de fuerzas de seguridad y un asedio, por el cual acudirá ante la Corte Internacional de Justicia.

Tanto España como México están gobernados partidos de corte de izquierda. El comunicado del Gobierno boliviano advierte que “algunos gobiernos guiados por compromisos ideológicos y sin entender aspectos sustanciales inherentes a nuestra realidad nacional, cometen actos de injerencia directa vulnerando principios y valores que sustentan la convivencia pacífica entre Estados”.