El presidente Luis Arce Catacora inició este sábado las obras del pozo exploratorio Charagua X1, en el departamento de Santa Cruz, asegurando que "la era del petróleo y el gas en nuestro país no ha concluido".

Arce destacó que este pozo exploratorio es uno más de la larga lista de iniciativas de YPFB y de las empresas petroleras establecidas en Bolivia, con el objetivo de dar una solución estructural al problema de la liquidez de dólares, que se originó en la falta de exploración oportuna en el pasado.

El mandatario reafirmó que su gobierno está corrigiendo los errores anteriores y expresó su confianza en el éxito de la inversión de 417 millones de bolivianos, de los cuales el 60% corresponde a YPF Argentina y el 40% a YPFB Chaco de Bolivia.

Esta inauguración forma parte de su agenda en Santa Cruz, a pocos días de la celebración de la efeméride del 24 de septiembre. Arce resaltó que el departamento tiene un gran potencial productivo, no solo en los sectores agropecuario y ganadero, sino también en el petrolero. Además, señaló que Bolivia cuenta con recursos gasíferos en todas las regiones, por lo que se continuarán los trabajos de exploración para garantizar no solo gas para la exportación, sino también para el abastecimiento interno y su industrialización.

En julio del año pasado, Yacimientos Petrolíferos Fiscales E&E Sucursal Bolivia S.A. (YPF) estimó un potencial de 1,4 trillones de pies cúbicos (TCF) de gas natural en el prospecto Charagua, destinando una inversión aproximada de 50 millones de dólares. Se prevé que el pozo CHA-X1 inicie la perforación exploratoria hasta alcanzar una profundidad de 5.000 metros.

La empresa argentina YPF está a cargo del Contrato de Servicios Petroleros del área de exploración Charagua desde el 26 de julio de 2017, con un plazo de siete años para realizar actividades exploratorias en el periodo inicial. El área se encuentra en la Zona Tradicional Hidrocarburífera, en la provincia Cordillera del departamento de Santa Cruz, y abarca una extensión de 39,7 parcelas, equivalentes a 99.250 hectáreas, según un reporte de la estatal petrolera boliviana.