El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se refirió este martes sobre la toma militar del 26 de junio en plaza Murillo de La Paz y consideró que “no se pueden tolerar actitudes ni golpes de Estado”.

La posición fue emitida tras un encuentro bilateral que sostuvo el mandatario brasileño con su par de Bolivia, Luis Arce, en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.

“En vísperas de celebrar su Bicentenario en 2025, Bolivia no puede volver a caer en esta trampa, no podemos tolerar actitudes autoritarias ni golpes de Estado, tenemos la enorme responsabilidad de defender la democracia frente a los intentos de hacerla retroceder”, afirmó.

Lula Da Silva recordó que en 2022, cuando Brasil celebró su Bicentenario de su independencia, atravesó una “ola de extremismo” con un intento de golpe de Estado.

Mientras que en Bolivia dijo que ya atravesó por similar situación en 2019, durante la crisis política y social que obligó a Evo Morales a renunciar al cargo y del pasado 26 de junio con la toma militar de Palacio Quemado que buscaba, presuntamente, gestar un golpe de Estado.

“En todo el mundo, la desunión de las fuerzas democráticas solo ha servido a la extrema derecha. Los recientes ejemplos de Francia y el Reino Unido demuestran el imperativo de superar las diferencias en favor de un objetivo común”, añadió.

Las investigaciones de la Fiscalía, establecieron que el excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga, fue uno de los promotores del levantamiento militar contra el Gobierno de Arce con ya ayuda de otro exjefes militares e incluso civiles. //agc