Fuente: AFP

Miles de fieles hindúes ascendieron este jueves el volcán Bromo en Indonesia para lanzar ofrendas al cráter humeante que recibe desde ganado hasta cosechas como parte de un ritual centenario.

Cada año los miembros de la etnia tengger se congregan en torno al volcán activo para preparar las ofrendas y subir a la cima para lanzar al cráter cabras, aves, frutas, flores y vegetales como parte de la festividad de Yadnya Kasada.

Con esta ascensión buscan complacer a los dioses hindúes para que les den prosperidad y buena suerte a las comunidades de este grupo étnico que vive en el este de Java.

"Pese a la pandemia, yo sigo viniendo aquí para traer las cosechas para expresar gratitud a los dioses y los ancestros", contó a la AFP Wawan, uno de los peregrinos.

Wawan lanzó pollos, frutas y verduras al cráter, mientras rezaba a más de 2.300 metros de altitud.

Algunos aldeanos que no forman parte de la tribu tengger se sitúan, con redes, en las escarpadas laderas con la esperanza de agarrar las ofrendas antes de que caigan al cráter humeante.

Bambang Suprapto, director de la asociación hindú local, dijo que el ritual se mantuvo en los años precedentes, pese a la pandemia.

Esta festividad anual se remonta a la legenda del siglo XV de la princesa javanesa Roro Anteng y su esposo.

La pareja, que pasó años de matrimonio sin tener hijos, rogó a los dioses que los ayudaran.

Sus plegarias fueron escuchadas y las deidades les prometieron 25 hijos, con la condición de que sacrificaran al último lanzándolo al volcán Bromo.

La leyenda cuenta que el hijo de la pareja se lanzó por su propia voluntad al cráter para garantizar la prosperidad de su pueblo.

La tradición se mantiene hasta la actualidad aunque sin sacrificios humanos, lanzando solo animales y productos agrícolas.

Como líder comunitario, Bambang lanzó sus ofrendas mientras rezaba para que la relación entre los humanos, los dioses y la naturaleza se mantenga en armonía.

"Si cuidamos a la naturaleza, ella cuidará de nosotros", destacó.