PRESERVACIÓN
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Universidades de Bolivia y Perú unen esfuerzos para descontaminar el lago Titicaca

El lago Titicaca. Foto: MMyA

Por Iván Ramos - Periodismo que Cuenta

En un esfuerzo conjunto para abordar la creciente contaminación y la disminución de los niveles del Lago Titicaca, un tesoro compartido entre Bolivia y Perú, diversas universidades de ambos países han unido sus fuerzas en una iniciativa de investigación sin precedentes. La Universidad Andina Simón Bolívar liderará este esfuerzo, coordinando los recursos y conocimientos de instituciones académicas clave en esta región.

La Universidad Nacional del Altiplano de Puno y la Universidad Nacional de Juliaca en Perú, junto con la Universidad Mayor de San Andrés, la Universidad Autónoma de El Alto, y la Universidad Indígena Aymara Tupak Katari en Bolivia, se han comprometido a emprender una profunda investigación científica centrada en los problemas hídricos del Lago Titicaca.

El Rector de la Universidad Andina Simón Bolívar, José Luis Gutiérrez Sardán, ha destacado la urgencia de esta investigación, señalando que las poblaciones de Juliaca y Puno en Perú, así como Copacabana, Desaguadero, Huarina, Tiquina, Waritaca y El Alto en Bolivia, suman millones de habitantes que, lamentablemente, carecen de sistemas adecuados de tratamiento de aguas residuales. Esto ha llevado a la descarga directa de aguas contaminadas en el Lago Titicaca, amenazando gravemente este tesoro natural y cultural compartido.

Walter Aparicio, Decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Puno en Perú, expresó su preocupación acerca de la gravedad de la situación. "Estamos tratando con un paciente que empeora cada vez más, mientras el mundo se ocupa de diagnosticar otras enfermedades al lago sin proporcionar respuestas y soluciones", afirmó.

En su visita a la planta de tratamiento de aguas de Yunguyo en Perú, el equipo de investigadores encontró un rayo de esperanza. Esta planta, que utiliza tecnología de oxigenación de alto nivel, ha estado operativa durante una década, beneficiando a unos 20 mil habitantes locales. El Rector Gutiérrez Sardán enfatizó que este modelo exitoso debe convertirse en un piloto para futuras acciones de contención. Sin embargo, la participación activa y la conciencia ciudadana son importante para garantizar el éxito de estos esfuerzos.

El Lago Titicaca, reconocido como Patrimonio de la Humanidad, no solo es vital para las comunidades locales en términos de pesca y turismo, sino que también es el lago navegable más alto del mundo. Además de la contaminación, el lago enfrenta la amenaza del descenso de sus niveles debido a la sequía y la falta de deshielo en las cumbres circundantes.

El Rector Gutiérrez Sardán hizo un llamado a la reflexión colectiva: "Todos debemos tomar conciencia sobre la acumulación de basura, la falta de árboles y la tala indiscriminada. Solo con un esfuerzo conjunto y un compromiso ciudadano podemos salvar este tesoro natural para las generaciones futuras".