Mecapaca: proponen que Bello Monte sea área protegida
Vía: Agencia de Noticias Ambientales (ANA)
Esta segunda parte de la entrega referida al sector de Bello Monte en Mecapaca refleja la importancia de que ese lugar emblemático de la biodiversidad de Río Abajo sea declarado como área protegida, donde ANA evidenció movimiento de tierras para habilitar lotes de terreno.
Texto e imágenes: Vladimir Ledezma Maldonado
La Paz, febrero de 2022 (ANA).- Vecinos del sector Bello Monte que se encuentra en la zona de Rio Abajo, altura Carreras, proponen al municipio de Mecapaca que el área que circunda a la urbanización, caracterizada por cerros con una enorme biodiversidad en flora y fauna, sea declarada como área protegida y por consecuencia cuente con catastro y un plan de manejo.
“Sí, estamos en eso, queremos de alguna manera proteger el cerro para las próximas generaciones, eso es importante, que las próximas generaciones no lo vean solamente en fotos o a las especies que después ya no hay o fueron extinguidas, solo las conozcan en fotos, en videos o en peluches”, confirmó Claudia Sánz, vecina del lugar y muy relacionada con organizaciones científicas y ambientales.
El lugar se encuentra junto a una cuenca cuyo curso de agua, el río Kelkata, desciende desde las faldas del mismo Illimani, , lo cual explica su rica biodiversidad que hacen de ese valle seco interandino un espacio natural de enorme valor tanto para los ecosistemas, para la fauna, para la generación de agua dulce, para la ciencia, para las comunidades que basan su economía en la agricultura y por supuesto para el turismo, un turismo responsable.
“Hemos hecho un pronunciamiento, hemos hecho un montón de cartas a la alcaldía, hemos mandado también al MMAyA (Ministerio de Medio Ambiente y Aguas) con respecto al movimiento de tierras que está en la parte final de Bello Monte y bueno, estamos esperando que nos respondan, hemos hecho el pronunciamiento con el Colegio de Biólogos de La Paz, esperemos que tengamos una luz verde para protegernos”, estimó nuestra informante.
Biodiversidad depredada con motosierras
Pese a que estaba nublado, se sentía frescura y el aroma de las plantas. En medio de chillidos de aves, como la paca, loros, vencejos, pinzones y otras cuarenta especies semejantes, además de cobayas, cuises silvestres y el sonido del silencio, recorrimos el lugar conjuntamente a la vecina entrevistada que nos orientó por esas latitudes llenas de molles, cactus imponentes y arbustos floridos con unas curiosas kantutas, en tanto que en la cresta del cerro se divisaban algarrobos y en las laderas había gran cantidad de bromeliáceas (v. “Bello Monte: biodiversidad de Mecapaca en serio riesgo por movimiento de tierras”, ANA, 26 de enero de 2022).
Precisamente donde existían tupidos matorrales, fue posible evidenciar que se trataba de sectores cuya peculiaridad era el de ser aires de río, y por tanto no aptos para construcciones. Pese a ello y con gran pesar comprobamos que unas personas que se identificaban como comunarios, procedían a aserrar los cactus con sierras a motor, con el objeto de habilitar espacios para terrenos destinados a edificaciones, probablemente a fin de comercializarlos como tales.
“Es fundamental (la biodiversidad), además en el desarrollo psicológico también de las personas, el niño que observa, que es observador, que le gusta la naturaleza, que está en contacto con la naturaleza va a ser mucho más empático en su vida posterior, tal vez ese acercamiento porque nosotros nos hemos desconectado totalmente de la naturaleza”.
Quemas y terraceos
En las serranías de enfrente, donde se terracearon espacios para levantar edificaciones y nuevas urbanizaciones, observamos con un sentimiento de impotencia columnas de humo que delataban quemas en esas áreas, “y uno dice «si aplano el cerro, hago mi casa», pero en realidad está quitando ese espacio para su propia familia, para sus próximas generaciones, son ellas las que podían haber de alguna manera, aprovechar todo lo que se observa de este paisaje, nos vamos al computador o al celular y olvidamos venir, caminar y hacer una foto, nos hemos desconectado totalmente”, reflexionó quien nos orientaba por ese sitio biodiverso.
Inclusive, durante la época seca las quemas son más frecuentes en el cerro, donde suben personas a encender fuego y sin discriminar queman plantas endémicas, en tanto que carbonizan lo que son los hogares de loros, insectos polinizadores y pequeños mamíferos que habitan el lugar, entre otras especies que son avistadas con menor frecuencia ante los gritos de impotencia de los vecinos que observan apesadumbrados la devastación, en tanto que no hay bomberos ni autoridades que impidan semejantes daños a la naturaleza.
En otras latitudes del planeta, como Alicante, España, es ejemplar el que las comunidades y vecinos del sector no han permitido la instalación de urbanizaciones por inmobiliarias y otras, porque ello implicaba el depredar el hábitat de numerosas especies, tanto en flora como en fauna. Supieron hacer respetar los derechos de la naturaleza y lograron imponerse a la codicia de grupos de poder. (VLM)