Iván Ramos - Periodismo que Cuenta

Un niño de nueve años, diagnosticado con rabia humana, se encuentra en estado crítico y bajo tratamiento paliativo en terapia intensiva, confirmó César Ríos Escalier, jefe médico de epidemiología del departamento de Chuquisaca.

“No hay tratamiento para la rabia”, afirmó Ríos, enfatizando la gravedad de la situación. El menor presentó los primeros síntomas el pasado 22 de noviembre, sin evidencias visibles de mordedura, lo que sugiere un posible contagio por lamedura o contacto con saliva de un animal infectado.

Este caso, el primero de rabia humana reportado en el departamento, está vinculado al brote de rabia canina detectado en el Distrito 3, donde varios perros han dado positivo al virus, según las autoridades de salud. “La rabia es mortal, y lamentablemente lo peor está por venir: el deceso del paciente, que actualmente está en coma inducido”, agregó Ríos.

OPERATIVO MASIVO CONTRA LA RABIA CANINA

En respuesta a esta crisis sanitaria, el alcalde de Sucre, Enrique Leaño, anunció un operativo conjunto con funcionarios municipales, la policía y el ejército para contener el brote. Zoonosis, la Intendencia, la Guardia Municipal, Seguridad Ciudadana y otras dependencias municipales participan en la recolección de perros callejeros en las áreas afectadas.

“Se trasladarán alrededor de 1.500 perros al refugio municipal de Puca Puca, ‘A Puro Corazón’”, detalló Leaño, quien también hizo un llamado enérgico a concejales y grupos animalistas. “Que nos dejen trabajar. Este caso de rabia humana es una consecuencia de las trabas puestas por estos sectores”, afirmó la autoridad.

LA RABIA, UN DESAFÍO PARA LA SALUD PÚBLICA

La rabia es una enfermedad viral que afecta al sistema nervioso central y tiene una tasa de mortalidad cercana al 100% en humanos una vez que aparecen los síntomas. Las autoridades han recordado la importancia de la vacunación de mascotas y evitar el contacto con animales sospechosos como medidas preventivas fundamentales.

Mientras el operativo avanza en el Distrito 3, los especialistas advierten sobre la necesidad de reforzar la vigilancia y las campañas educativas para prevenir futuros contagios. El caso del menor ha generado conmoción en la población y ha puesto en evidencia la urgencia de abordar la problemática de la rabia con mayor efectividad.