La Intendencia Municipal de La Paz clausuró un bar clandestino que operaba en el sótano de una vivienda en el macrodistrito Max Paredes. Durante el operativo, se descubrieron bebidas alcohólicas caducadas, sin registro sanitario, y otras preparadas de manera artesanal, lo que representaba un riesgo para la salud pública.

“Hemos encontrado aproximadamente 60 litros de bebidas fabricadas en baldes y tachos, además de 10 litros de alcohol etílico", informó Karina Oblitas, intendente del macrodistrito, tras el operativo llevado a cabo junto con la Policía Boliviana en una vivienda ubicada entre las calles Lino Monasterios y Juan Granier.

Según la autoridad, las bebidas incautadas eran de dudosa procedencia y no contaban con garantías de salubridad.

El operativo resultó en el arresto de ocho personas que consumían bebidas en el lugar y la aprehensión de los administradores del negocio, quienes serán investigados por atentado contra la salud pública. Vecinos del sector apoyaron la clausura, denunciando que el bar generaba inseguridad en la zona.

El personal de la Intendencia Municipal procedió a sellar el local y advirtió sobre los riesgos de consumir productos preparados sin controles sanitarios, que pueden poner en peligro la salud de los consumidores, según despacho de la agencia oficial de noticas municipales.