NECESITAN MEJORES CONDICIONES
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Distribuidores de GLP alertan que su sector ‘está muriendo’ y prevén un posible desabastecimiento

Los distribuidores de las garrafas se reunirán con autoridades.

La Cámara Nacional de Distribuidores de Gas Licuado de Petróleo (GLP) alertó  este jueves que su sector está muriendo por la falta de condiciones económicas para sus actividades, por lo cual se podría venir un desabastecimiento en los próximos meses si las autoridades no asumen medidas al respecto.

El presidente de la Cámara, Fernando Segovia, indicó que han llegado a una “situación casi insostenible”, donde sus costos se han incrementado, pero la garrafa de GLP mantiene su precio desde hace dos décadas.

“Poco a poco estamos muriendo”, lamentó el empresario a tiempo de señalar que, por la situación económica, han tenido que reducir personal y unidades vehiculares para operar en condiciones precarias de sobrevivencia, donde por ejemplo sólo se pueden permitir comprar llantas usadas.

Su situación se agrava tomando en cuenta que el 90% de las unidades funcionan a diésel, un combustible que ha escaseado en los últimos meses.

Explicaron que, según un estudio de 2018, sólo perciben de comisión 14 centavos por garrafa, lo cual no cubre sus operaciones. Hace cinco años ya pidieron que se incremente su comisión en Bs1, pero la garrafa sigue costando Bs22,50.

Los directivos mencionaron que actualmente ya es tan fácil conseguir una garrafa por parte de la población, pero esta situación puede derivar en un desabastecimiento.

“Si el día de hoy no se toman decisiones, el desabastecimiento del carburante que puede venir los siguientes meses no va a ser responsabilidad de la empresa privada, de nosotros, sino tiene que ser responsabilidad de las autoridades que han hecho caso vano de todas las solicitudes”, señaló el directivo Néstor Zamora.

Según Zamora, las autoridades no han ofrecido soluciones, sino por el contrario la Agencia Nacional de Hidrocarburos les amenaza con intervenciones en caso de que suspendan los servicios.

Segovia enfatizó que el sector no tiene la idea de tomar medidas radicales, sin embargo, ratificó que de no mejorarse las condiciones “se va a dejar de operar”. Insistió en que sólo buscan una “remuneración justa”.