La Bolsa Boliviana de Valores (BBV) cumplió el 20 de octubre 34 años, en los que la institución ha venido trabajando arduamente junto con todos los actores del sector bursátil para desarrollar el mercado de valores nacional.

En la jornada de celebración asistieron ejecutivos de las instituciones del mercado de valores como la Asociación Boliviana de Agentes en Valores (ABAV), Entidad de Depósito de Valores (EDV), Asociación de Bancos Privados de Bolivia (ASOBAN), Gestora Pública, Asociación de las Instituciones Financieras de Desarrollo (FINRURAL), agencias de bolsa, SAFIS y sistema financiero nacional.

La persona encargada de dar inicio a este evento fue el presidente del directorio de la BBV, Hugo Morató, quien brindó algunas palabras a los invitados, resaltando la situación por la que este año atravesó la economía del país y su repercusión en el mercado de valores, visibilizando el liderazgo de la Bolsa en tomar acción sobre las gestiones normativas y habilitación de mecanismos de negociación para mantener las condiciones del mercado y de la importancia del acercamiento, capacitación y comunicación entre todos los participantes del mercado para fortalecer la confianza en el mercado de valores nacional.

“La aplicación de la normativa, sus adecuaciones y la implementación de mecanismos alternativos de negociación, representan un continuo aprendizaje para el mercado de valores, permitiendo mejorar continuamente los procesos de formación de precios, reducir la manipulación y prevenir prácticas que afecten la integridad en los mercados de valores”, resaltó Morató.

La celebración estuvo acompañada de la presentación de Pablo Irusta Zambrana, como el nuevo líder que dirigirá a la Bolsa Boliviana de Valores, ocupando el cargo de Gerente General. Durante su discurso, Irusta destacó que su misión al mando de la Bolsa será “generar las condiciones necesarias para restablecer la confianza en el mercado, devolverle la liquidez, profundizarlo, dinamizarlo y sobre todo transparentarlo, bajo un esquema de tolerancia cero a cualquier acción que ponga en peligro la confianza en nuestro mercado”.

El evento fue marcado por un aire de transición y una mirada hacia el futuro de un mercado de valores mucho más sólido, enfocado en la escucha activa a los inversionistas y a todos los participantes, estrechando lazos de confianza y cooperación con la entidad reguladora, avanzando de acuerdo a las necesidades del mercado y sus expectativas, con una visión mucho más amplia sobre los mecanismos, servicios y oportunidades que debe generar el mercado de valores.

Todo ello con el propósito de apoyar al desarrollo de la economía del país y el dinamismo que la empresa privada espera del mercado de valores.

*Con información de la Bolsa Boliviana de Valores (BBV)