Tras la renuncia de Jeanine Añez a la candidatura de la alianza Juntos, donde el Movimiento Demócrata Social era su principal aliado, Rubén Costas anunció que convocarán a sus dirigentes departamentales para  “evaluar y diseñar de manera inmediata su nueva hoja de ruta en la actividad política nacional".

Costas valoró la renuncia de Añez y Samuel Doria Medina porque constituye un paso hacia la recuperación de la Democracia, y dijo que el último mes de la campaña electoral, interrumpida y marcada por la pandemia, debe servir para que todos asuman la responsabilidad y evitar que Bolivia vuelva al pasado totalitario de los últimos 14 años.

Se declaró convencido que tanto los ciudadanos como los líderes de los partidos sabrán asumir la responsabilidad que les corresponde en este momento, y actuarán, como la Presidenta, anteponiendo la Patria a las aspiraciones de los partidos y de los líderes.

Dijo que siempre apoyaron la concertación y de la unidad, y consideran que la renuncia de Añez para evitar la dispersión, sólo puede ser interpretada y entendida en términos de la construcción de la unidad de los votantes, toda vez que no ha sido posible la unidad de los candidatos.

El líder de los Demócratas llamó a la ciudadanía y al resto de los candidatos, a construir, desde la responsabilidad individual y colectiva, un principio y un valor más grande que cualquiera de nosotros que es  Bolivia.