El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, a tiempo de recordar los muertos y enfermos por COVID-19 de las filas del MAS, llamó a los dirigentes del Movimiento al Socialismo a que suspendan las movilizaciones anunciadas, debido al riesgo de la pandemia.

“No estamos viviendo un momento normal y les queremos pedir de la forma más amigable posible a los dirigentes del MAS, no sigan mandando a la muerte a su gente. Llamar a una movilización es directamente llamarlos a la muerte, porque de cada movilización quedan cientos de infectados”, dijo Murllo en conferencia de prensa.

Señaló que, si hay contagiados y fallecidos por el coronavirus, “esos muertos van a tener que cargar en su conciencia los dirigentes del MAS”.

Pidió reflexionar especialmente a Luis Arce, Evo Morales y David Choquehuanca y les dijo que no manden a que “no manden a la gente a morir sin ningún motivo”. Aseveró que el COVID puede matar a la gente que se moviliza por hacer caso a la gente que solo le interesa la política. 

Agregó que es momento de cuidar la vida y que después ya habrá tiempo de hacer política.

Murillo recordó las personas de filas del MAS que fallecieron por COVID, desde el alcalde de Entre Ríos, Aurelio Rojas, hasta el exviceministro Marcelo Elio. También mencionó a los dirigentes del Movimiento al Socialismo que cayeron enfermos y aseveró, incluso, que Andrónico Rodríguez fue internado en un lugar que se guarda como “secreto”, y que “todo apunta” a que Luis Arce también tiene COVID. 

Luego, Arce denunció mediante redes sociales que hubo "una mentira e ilegalidad" sobre su estado de salud y, además informó que se encuentra bien.

Organizaciones sociales del MAS anunciaron movilizaciones desde esta semana en rechazo a la postergación de las elecciones y exigiendo que la votación sea el 6 de septiembre. En La Paz, la COB llamó a una marcha desde Senkata para el martes.

El ministro Murillo reiteró que el Tribunal Electoral tomó la decisión de postergar las elecciones de manera autónoma.