Iván Ramos - Periodismo que Cuenta

En un paisaje salpicado de viñedos que se extienden a lo largo de los campos cinteños de Chuquisaca, una emocionante oferta turística se está gestando, atrayendo a los amantes del buen vino y la historia a las centenarias casas de hacienda que datan del siglo XVII.

El itinerario invita a degustar la exquisita producción local de singani y vino en los municipios de Camargo, Villa Abecia y Las Carreras, donde las bodegas abren sus puertas para mostrar el proceso de elaboración de la uva y sus derivados. Entre los viñedos y la pintoresca campiña, los visitantes se sumergen en un mundo de aromas y sabores únicos.

Este viaje de descubrimiento contó con la participación de una veintena de operadores turísticos nacionales, quienes fueron recibidos y guiados por Roxana Acosta, Directora Departamental de Turismo de Chuquisaca. "Es una oportunidad para familiarizarse con nuestras riquezas naturales y culturales, y para fortalecer el turismo en la región", comentó Acosta.

Además de la experiencia enológica, el recorrido incluyó la visita a emblemáticos lugares de Sucre, la capital de Bolivia. Desde la majestuosa Manzarda, cúspide del primer palacio de Gobierno, hasta la imponente Catedral y el histórico palacio de la Glorieta, los operadores turísticos fueron testigos de la riqueza arquitectónica y cultural de la ciudad.

El resultado de esta experiencia se espera entre agosto y septiembre, cuando los operadores turísticos presenten paquetes que combinan la encantadora Sucre con los pintorescos paisajes cinteños. Desde la celebración del fin de año hasta el bullicio del carnaval y la destacada feria vitivinícola de la región, que lleva con orgullo el nombre del Singani boliviano al mundo, los viajeros tendrán la oportunidad de sumergirse en una experiencia inolvidable que fusiona historia, cultura y tradición en cada rincón de Chuquisaca.