Economía
Por el segundo aguinaldo
Obras sociales de la Iglesia corren riesgo de cerrar
Aurelio Pesoa, Secretario General de la CEB leyó el comunicado. Foto: CEB.


Martes, 18 Diciembre, 2018 - 12:41

La Conferencia Episcopal Boliviana alertó este martes que las obras sociales de la Iglesia Católica corren el riesgo de cerrarse, debido a que les es imposible pagar el doble aguinaldo, tomando en cuenta que son entidades de caridad.

“Todas las obras sociales de la Iglesia son totalmente dependientes de la caridad y la solidaridad, y frente a la medida del doble aguinaldo corren el peligro de tener que cerrar, dejando de prestar su servicio a los más necesitados”, dice el comunicado de la CEB leído por su secretario general Aurelio Pesoa.

Si bien la Iglesia sostiene que desearía poder cumplir con ese pago, no cuenta con ingresos suficientes para cubrir las necesidades de la población atendida en sus obras sociales, por lo que le es “imposible cubrir el segundo aguinaldo, ya que son obras de por sí deficitarias”. 

“Como se sabe el pago del doble aguinaldo está ligado a los niveles de productividad de las empresas, mientras que las obras sociales de la Iglesia, por su naturaleza, son obras de servicio”, explicó.

La CEB reveló que el propio presidente Evo Morales, en una reunión del 23 de julio, le indicó dirigir una nota oficial por este tema.

En ese entendido, la conferencia dirigió el 10 de octubre una nota a la Cancillería de Bolivia solicitando la exención del doble aguinaldo, para un listado de  obras sociales, aduciendo que éstas trabajan para aliviar las necesidades de los sectores más vulnerables de la sociedad, sin ningún interés de lucro.

Sin embargo, la Cancillería comunicó que había remitido la carta al Ministerio de Hacienda y, hasta la fecha, no se cuenta con una respuesta a este pedido.

En sus obras sociales, la Iglesia atiende a sectores en situación de vulnerabilidad, como niños, adolescentes, jóvenes, personas en situación de calle, personas con dependencias de alcohol y drogas, privados de libertad, madres adolescentes, personas de la tercera edad, personas con problemas psiquiátricos, víctimas de trata y tráfico.  

“Encomendamos estas preocupaciones e iniciativas al Dios de la Vida para que ilumine a nuestras autoridades y permitan que este tipo de obras puedan seguir brindado su servicio en el futuro”, finaliza el comunicado de la CEB.