Seguridad
El aludido lo niega
Acusan al fiscal Quispe por supuesto secuestro y soborno


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Martes, 27 Enero, 2015 - 19:04

El orfebre Mario Gutiérrez Choque denunció que el fiscal Humberto Quispe lo secuestró y le pidió 500 dólares para favorecerlo. Además, sostuvo que el representante del Ministerio Público está involucrado en el hurto de sus joyas de depósitos de la Policía. Quispe negó las acusaciones y afirmó que Gutiérrez compró oro robado.

El artesano, en entrevista con ERBOL, relató que el 25 de febrero de 2014, a las 17.30, Quispe, junto a siete personas, se presentó en su negocio, ubicado en la avenida América, acusándolo de haber comprado dos lingotes de oro por el precio de 12.500 dólares. Negó que esta versión sea verdad porque él adquiere material sólo en bolivianos.

Gutiérrez señaló que entonces lo subieron a un taxi y lo llevaron hacia el parque Líbano. Allí, otra persona ingresó al vehículo y lo interrogó sobre sus ingresos y su familia. Luego, entró el Fiscal y le preguntó “¿Cuánta plata tienes?”. El joyero recordó que tenía disponibles unos 1.000 dólares, y el representante del Ministerio Público le pidió 500. El acusado intentó llamar a su esposa Fabiola Ríos.

En el ínterin, su esposa denunció el hecho a la Policía y llegó a la plaza Líbano en compañía de una patrulla policial. Gutiérrez dijo que Quispe advirtió esa situación y el taxi se movió hacia otro lugar.                

A las 22.00, Gutiérrez fue llevado a instalaciones policiales de la zona Sur donde se le acercó una abogada, Cristina Moscoso, quien aseguró conocer a Quispe.

El joyero explicó a la jurista que el Fiscal le pidió 500 dólares. Ella ingresó a hablar con Quispe y volvió diciendo que ahora quería 1.000 dólares. Gutiérrez logró recaudar 7.000 bolivianos y los entregó. Moscoso le dijo que el proceso se arreglaría y que al día siguiente el Fiscal iría a la joyería.
         
Ríos indicó que, luego, Quispe pidió a los afectados esperar para sacar el precintado de la tienda, hasta que se calme la mujer dueña de la joyería que denunció el robo de oro, María Lourdes E., quien exigía revisar la tienda para reconocer sus objetos.       

Después, Gutiérrez fue incluido en una querella por el robo a la joyería de María Lourdes E.

El precintado se sacó el 5 de marzo. Quispe secuestró objetos de oro al interior del negocio de Gutiérrez en el acto.

Dos días después, el Fiscal y María Lourdes E. procedieron al reconocimiento de objetos. La denunciante identificó cuatro objetos.

Por otro lado, el Fiscal no devolvía lo demás a la pareja. Ellos se quejaron y en julio una Jueza ordenó a Quispe que se devuelva el material.

Entonces, la pareja se presentó en depósitos policiales para recoger sus joyas. En el acto de secuestro, las autoridades se llevaron 83 mil bolivianos, al momento de la devolución había sólo 50 mil. Además, los policías quisieron hacer pasar una pepa de bronce como si fuera de oro, según la denuncia de Gutiérrez.

Asimismo, los uniformados presentaron a los joyeros un acta diferente de reconocimiento de objetos a la que se conocía, con la misma fecha. Lo diferencia es que en este nuevo documento, María Lourdes E. idéntico siete objetos y no sólo cinco como constaba en el anterior texto.

Por esas irregularidades, Gutiérrez decidió no recoger el material y querellarse contra María Lourdes E. acusándola de hurto.

El joyero aseveró que el abogado de esta mujer llamó a su defensa y ofreció un arreglo que consiste en devolver 200 gramos de oro, porque ella había recogido 800 gramos y el resto se lo repartieron entre autoridades.

El Fiscal aseguró que los objetos secuestrados están en la Policía y manifestó que más bien la pareja debe demostrar cómo ha conseguido las joyas.

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