Seguridad
Uno de los detenidos estaba en la discoteca
Surgen más indicios en el caso de la pareja desaparecida
La pareja está desaparecida desde Año Nuevo.


Miércoles, 17 Enero, 2018 - 13:16

Tras seguir el rastro del celular de Jesús Cañisaire, el joven que desapareció en Año Nuevo junto a su pareja Carla Bellot, la Policía y la Fiscalía encontraron mayores indicios sobre este caso, que aún continúa en el misterio.

El fiscal departamental de La Paz, Edwin Blanco, informó que uno de los últimos detenidos por el caso estuvo en la discoteca Planta Baja en la noche de Año Nuevo, donde también estaban Jesús Cañisaire y Carla Bellott.

El fiscal indicó que siguiendo el rastro del celular de Jesús se dio con el paradero de ocho personas, de las cuales dos quedaron aprehendidas por conocer sobre el celular y dónde se lo obtuvo, mientras que los otros seis están como testigos.

Explicó que quien tenía el teléfono llevó el equipos a dos técnicos, para intentar flashearlo, es decir, restaurar sus sistema y restaurar su identificación. El celular fue detectado cuando uno de estos técnicos encendió el mismo y le puso un chip para revisar su estado.

El fiscal señaló que uno de los detenidos confesó haber estado en la discoteca Planta Baja en el día de la desaparición de Jesús y Carla, pero evitó dar mayores detalles para no entorpecer la investigación.

Siguieron el rastro a un sauna

El director de la FELCC, coronel Jhonny Aguilera, señaló que el celular de Cañisaire fue encontrado en posesión de un joven de 25 años de profesión taxista, quien a su vez dijo que su mamá le entregó el teléfono.

La madre del taxista, de nombre Irene, dijo a la Policía que el celular se recogió del sauna H2o Oasis de la zona de Villa Fátima, donde habría sido dejado por otras personas, en una modalidad denominada “caleta”, en la cual delincuentes escondan un objeto robado para que otros lo recojan, para evitar contacto físico.

Siguiendo el rastro del celular, la Policía indagó que los responsables de ocultar el celular serían tres personas: una menor de 17 años, su pareja y su hermano, quienes están buscados, según el coronel Aguilera.

El jefe de la FELCC indicó que el chip de Cañisaire fue activado por el celular de la una niña hija de Irene. Antes, se detuvo a una joven de Oruro por usar el número de celular del joven desapreciado.  

El celular de Carla, por otro lado, ya se encuentra en posesión de la Policía desde la semana pasada. Se envió a la cárcel a dos personas por estar vinculadas con la posesión y venta de este teléfono, pero una fue dejada en libertad por un juez.