Política
En Portugal
Mesa y Tuto arremeten contra el Socialismo del Siglo XXI en foro internacional
Carlos Mesa y Tuto Quiroga en la conferencia en Estoril.


Martes, 28 Mayo, 2019 - 11:34

Los opositores Carlos Mesa y Tuto Quiroga participaron este martes en un foro internacional, realizado en Portugal, donde arremetieron contra el Socialismo del Siglo XXI y los afanes que consideran autoritarios del actual presidente boliviano Evo Morales.

El encuentro se denomina Conferencias de Estoril, que se realizan de forma bianual. Mesa y Tuto participaron en el foro denominado Socialismo del Siglo XXI, Lecciones de Sudamérica. Estuvieron junto con personajes como el expresidente uruguayo Luis Alberto Lacalle y el director de El Nacional de Venezuela, Miguel Otero.

Para Mesa, hoy el Socialismo del Siglo XXI pasó a ser un proceso de duración corta que ahora es “de decadencia y degradación al que se adscriben todavía muy pocos países de la región, fundamentalmente bajo el padrinazgo de Cuba”.

Según el exmandatario, el Socialismo del Siglo XXI aparentaba dar una respuesta nominalmente democrática, pero que lo que buscaba era “penetrar la democracia, destruirla desde adentro y construir una institucionalidad ‘revolucionaria’, para marcar la legitimidad a partir de la destrucción de las instituciones democráticas”.

Dijo que el mayor pecado del Socialismo del Siglo XXI es la destrucción de valores democráticos, a partir del control total de los poderes, la reelección indefinida y la apropiación de la voluntad popular.

Manifestó que en el caso de Bolivia se pretende justificar una práctica autoritaria con los argumentos de transformación social, inclusión y el éxito económico, sin embargo, señaló que la construcción de una base de recursos energéticos permitió al Gobierno del MAS realizar una política macroeconómica “razonable”, pero al mismo tiempo eso se vinculó a la destrucción de los valores democráticos.

“En el caso de Bolivia no es un debate sobre inclusión que nadie discute, ni lucha contra la pobreza, que nadie discute ni reivindicación del género que nadie discute, es un debate sobre los valores centrales en los que creemos y un debate sobre una mentira que tiene que ver con mis conquistas sociales son imposibles en otro modelo”, afirmó.

Mesa señaló que otros países, como Perú, Colombia o Chile, que aplican otros modelos, encontraron resultados de inclusión social, de lucha contra la pobreza y mejoramiento global de la sociedad que no requirieron de destruir las instituciones democráticas.

Quiroga, por su parte, centró su participación en el caso venezolano. Explicó que el proyecto bolivariano de Hugo Chávez pasó a ser Socialismo del Siglo XXI, cuando subió el precio del petróleo, para llamar la atención de países donde Simón Bolívar no es muy significativo.

Señaló que Chávez llevó adelante aquello sentado sobre las reservas de petróleo más grandes del mundo. “Ser populista con dinero petrolero es fácil”, indicó.

No obstante, Quiroga indicó que la caída del precio del petróleo coincidió con el arribo de Nicolás Maduro al poder. “En el país más rico de las Américas de la historia, más rico que Estados Unidos en potencial de recursos naturales, qué ha hecho maduro en seis años: el PIB de Venezuela está camino a ser la tercera parte de lo que era cuando empezó”, explicó.

Dijo que para sostener el modelo en Venezuela hubo un matrimonio en el cual Cuba recibe el petróleo venezolano, y entrega a cambio un sistema de represión masivo selectivo que incluye la tortura.

Respecto a Bolivia, Quiroga dijo que Morales ya recibió el país con contratos de exportación de gas y su ascenso coincidió con la subida del precio de los hidrocarburos. Manifestó que el populismo es llevadero con dinero, pero en Bolivia hubo despilfarros con edificios, Jet Falcon, helicópteros y recién ahora van a llegar momentos más complejos.

Concluyó que la clave central para el autoritarismo es el continuismo. Señaló que el común denominador en países como Venezuela, Cuba, Nicaragua y Bolivia es el tiempo que se mantienen en el poder. Calificó de aberrante que en Bolivia, clonando el "truco nicaragüense", se haya acudido a una sentencia judicial para habilitar la reelección indefinida, arguyendo que la Convención Americana de Derechos Humanos la ampara.