Política
Visita del Secretario de la OEA marcó un punto de inflexión
Evo antes decía ‘loco’ y ‘mercenario’ a Almagro, ahora le llama ‘hermano’ y le desea éxito
Almagro visitó San Francisco en el Chapare, donde está la casa de Morales. Foto: ABI.


Viernes, 17 Mayo, 2019 - 20:50

Un minuto de declaración fue suficiente para zanjar una tensión de años. En 60 segundos, Luis Almagro expresó su visto bueno a la repostulación de Evo Morales, lo que causó el beneplácito del Movimiento al Socialismo y que el mismo mandatario se refiera a él en términos gentiles, alejados de la diatriba y epítetos como “loco”, “mercenario” o “títere” con que antes arremetía contra el Secretario General de la OEA.

La visita de Almagro este viernes a Bolivia generó expectativa sobre lo que diría el uruguayo respecto a la situación política boliviana, tomando en cuenta que en el pasado ya expresó su rechazo a la reelección y es conocido por su lucha contra gobiernos aliados de Morales, como el de Nicolás Maduro y Daniel Ortega. Algunos opositores ya habían alertado antes de que el Secretario General vendría a convalidar la repostulación y, como después de confirmó, tenían razón.

En alrededor de 60 segundos, desde la Casa Grande del Pueblo, Almagro dio su bendición a la repostulación, con el argumento de que otros presidentes ya habían postulado basados en fallos judiciales sobre derechos humanos y que, en ese marco, negárle la participación a Morales sería discriminatorio. El uruguayo dejó boquiabiertos a propios y extraños.

La sorpresa crece al recordar los antecedentes de los cruces Evo y Almagro. En el pasado, el mandatario boliviano arremetió duramente contra el Secretario General por cuando denunciaba arbitrariedades de Nicolás Maduro y buscaba restaurar la democracia en Venezuela.

Uno de los más fuertes ataques de Morales a Almagro surgió en julio de 2017, cuando en Twitter publicó que el uruguayo “está loco”, acusándolo de querer derrocar a Maduro.

Posteriormente, en octubre de ese año, Morales ironizó con dotarle un siquiatra a Almagro por su vida y la democracia.

El mandatario en reiteradas oportunidades se refirió a Almagro como un “agente” de Estados Unidos. Pero, también llegó a tildarlo de “títere del imperio”.

En 2018, siguió el ataque. Morales atribuyó al Secretario de la OEA una “obsesión golpista” contra Maduro, y lo calificó de servil al “imperio”.

En mayo de ese año, el jefe de Estado tildó a Almagro de “mercenario enemigo de la democracia”, por desconocer las elecciones en Venezuela.

A pesar de todo aquello, desde este viernes las cosas parecen haber cambiado entre el presidente y el Secretario General. En sendos actos públicos en La Paz y el Trópico de Cochabamba, Morales no decía “Almagro” sin antes decir “hermano”.

En su cuenta de Twitter, Morales no sólo agradeció a Almagro por sus palabras, que para él significaron el reconocimiento a la legalidad y legitimidad de su candidatura, sino también le deseó éxito en su labor en la OEA.

Las declaraciones de Almagro cayeron como un balde agua fría a la oposición, que reaccionó indignada porque antes el mismo Secretario General de la OEA expresó que Morales debe respetar el voto del 21F y que ningún juez podía levantar ese mandato.

Elogios    

Almagro este viernes acompañó al presidente, no sólo en actos protocolares en la sede de Gobierno, sino también a conocer la planta de Urea en Bulo Bulo, visitar la casa de Morales en el Chapare y hasta entregar una cancha en esa región, donde el presidente lo declaró “invitado especial”.  

En todo el trayecto, el Secretario General no ahorró elogios para los logros que había advertido en sus visitas. En la planta de Úrea, dijo que el complejo productivo es “algo muy positivo, muy fuerte” y un ejemplo para los demás países de la región. El uruguayo también ponderó al teleférico, que lo calificó como de “primer mundo” y hasta tuvo sus elogios para la cancha entregada en Lauca Ñ, que consideró “un paso adelante” en la inversión para la juventud y que contribuye a la mejor formación de la gente.